Pese al incremento en el número de efectivos militares y de la Guardia Nacional que se han desplazado para reforzar los operativos de seguridad en Iguala, Chilpancingo y Acapulco, en donde se acentúan los homicidios dolosos, la estrategia de seguridad en el estado está dando pocos resultados.
Tan solo este martes, en Taxco fueron ejecutados el chófer de una combinación y su pareja, mientras que en la barranca de Apatzingo, en Chilpancingo, fue asesinado a golpes a un hombre que estaba atado de pies y manos, y tres cuerpos fueron hallados (entre estos dos mujeres), en una cisterna en calle Indeco, también en la capital del estado.
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Este 28 de junio el saldo fue de el incendio de un vehículo de lujo y dos restaurantes, ubicados en la zona del Acapulco Diamante, además de un hombre herido a balazos en la colonia Garita, presuntamente Policía Municipal y el cuerpo de una persona del sexo masculino fue hallado en la cajuela de un vehículo en esa misma colonia. En todos estos casos no hay detenidos.
En Acapulco se tiene un registro de 222 homicidios dolosos en lo que va de este año, así como balaceras con lesionados, “levantones”, desapariciones de personas e incendios de casas, negocios y automóviles, debido a las pugnas de grupos antagónicos vinculados con el crimen organizado.
Con la prioridad de revertir este escenario, de hizo un despliegue de más de 2 mil elementos de seguridad federal, en el que participan además el Ejército Mexicano, Marina y Policías Estatales, en los operativos de seguridad, que se han limitado a ser simples espectadores de esta estela de violencia que se padece en distintos puntos de la ciudad, incluida la franja turística.
Los reportes que emiten las autoridades que integran la Mesa de Coordinación para la Reconstrucción de la Paz, nomás no cuadran con la realidad que se padece en las principales colonias de este destino de playa, en donde grupos de civiles provistos de armamento de grueso calibre tienen el control total.
El distintivo de esta estela de violencia que no reconocen los tres órdenes de gobierno, es que, hasta en lo que va del mes de junio, se contabilizaron 30 homicidios dolosos relacionados con el crimen organizado, tan solo en el puerto de Acapulco.
De acuerdo a datos de los dirigentes del sector empresarial, es que además las extorsiones se dispararon y trabajan bajo el acoso de grupos de delincuentes, quienes a toda costa les quitan parte de sus ingresos y los mantienen bajo amenazas, a pesar que las autoridades afieman que van a la baja los delitos de alto impacto.
En el primer cuatrimestre de este 2022, se cometieron 153 asesinatos atribuidos a los grupos delincuenciales del crimen organizado, que fueron perpetrados en Acapulco.
Publicado originalmente en El Sol de Acapulco
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