Morelia, Michoacán (OEM).- A casi cinco meses de que Nilda Rosario Francisco de la Cruz desapareció en Morelia, el padre de la estudiante nicolaita lamentó no tener más apoyo por parte de las autoridades universitarias, al menos en cuanto a los reclamos de justicia hacia las autoridades. Considera que los posicionamientos que realizó el rector nicolaita “tuvieron que ver más con la presión generada por las manifestaciones estudiantiles”.
“Por parte de la Universidad los primeros días sí estuvieron atentos con nosotros, pero tras meses ya no se han presentado para preguntarnos qué ha pasado con mi hija. El representante de Asuntos Estudiantiles se acercó más por las marchas, pero de ahí en fuera no hay apoyo por parte de la Universidad”, señaló.
La joven desaparecida estudiaba Veterinaria en la Universidad Michoacana, y estaba por concluir sus estudios. El próximo 15 de agosto se tiene programada la ceremonia de graduación para la generación a la que pertenecía, la última vez que habló con ella, horas antes de su desaparición, le dijo que estaba eligiendo el vestido para la ocasión.
“Para mí Nicolás es culpable hasta que demuestre lo contrario”
Para el señor Fortunato no hay duda de que Nicolás G. está relacionado con la desaparición de su hija y cree que puede haber más personas involucradas. Refiere que Nilda mantuvo una relación con el imputado hasta uno o dos años atrás, pero cuando ella decidió terminarla comenzó a acosarla al punto que tuvo que hablar con él y pedirle que dejara de molestarla. Luego de la desaparición de su hija se enteró que seguía viendo al presunto responsable.
“Este fulano es una persona violenta, maltrata a las mujeres. No soy el único que dice eso, puede preguntar a cualquier alumna de la Casa Rosa Luxemburgo y puede corroborar que se trata de una persona violenta”, afirmó Fortunato Francisco.
Aseguró que hay testigos de que él fue la última persona con quien estuvo su hija, en un cuarto ubicado en la calle Jacona en la colonia Juárez y reiteró su molestia porque las autoridades extiendan tanto el tiempo para poder obtener una declaración.
“Hay testigos, lo supimos desde un principio, pero lo manejábamos de manera discreta para que no se diera a la fuga. Desde un principio yo no quito el dedo, lo señalo como culpable de la desaparición de mi hija. Y tal vez haya otras personas involucradas, por eso pienso que no quiso declarar. No sé, pero yo creo que hay algo turbio ahí”, añadió.
A casi un mes y medio de operación de la Comisión para la Búsqueda de Personas Desaparecidas en Michoacán, la familia de Nilda, no sabían de la existencia del organismo.
“No tenemos conocimiento de eso (la creación de la CBPD). Hasta ahorita nadie de ahí nos ha contactado para nada”, declaró en entrevista el padre de Nilda, Fortunato Francisco Francisco.
En ese sentido, indicó que quien le ha brindado apoyo para cubrir los pasajes de Ixtapaluca a Morelia ha sido la Comisión Estatal Ejecutiva de Atención a Víctimas. Por otro lado, manifestó haber recibido un buen trato por parte de personal de la Fiscalía General del Estado en la realización de las indagatorias que llevaron a la detención del presunto responsable.
“Te voy a entregar el título en cuanto me gradué”, le decía Nilda su padre
“Había muchos planes. Tenía planeado trabajar en su carrera o con un tío suyo. En la última plática que tuve con ella me dijo que estaba viendo el vestido de la ceremonia de graduación. ‘En cuanto yo me reciba te voy a entregar el título’, me decía. Da coraje ver que el detenido no quiere hablar y dar información que permita dar con el paradero de mi hija”, lamentó el padre de Nilda.
Hoy, para el señor Francisco, los preparativos para la graduación están detenidos, ahora la fecha que espera con ansia es el 29 de septiembre, día de la próxima audiencia en un proceso judicial que considera lento.
Piensa que el sistema de Justicia Penal da demasiados beneficios a los presuntos responsables. Le indigna que el vinculado a proceso por la desaparición de su hija se haya guardado el derecho a declarar, lo que podría agilizar la ubicación de su hija.