Morelia, Michoacán (OEM-Infomex). - Son casi las 11 de la mañana y vecinos de la colonia Carlos Salazar, al norte de Morelia, hacen lo que pueden por sacar el agua de sus casas, luego de que la tarde y noche del jueves una tromba azotara a la ciudad.

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En su mayoría hay personas de la tercera edad que viven solas, así que tuvieron que llamar a sus hijos para que las auxiliaran, toda vez que las autoridades de Protección Civil estatal y municipal solo se encargan de los trabajos en calle.

Las consecuencias en esta zona ubicada al bordo del río son fatales: colchones mojados, muebles echados a perder, refrigeradores que ya no prenden y autos que siguen sin encender porque el nivel de agua llegó hasta el metro de altura.

Así es cada que una lluvia fuerte azota a esta colonia que es un auténtico hoyo que recibe no solo el líquido del río y otros puntos, sino cantidades grandes de basura que van tapando las coladeras, lo que provoca que rápidamente haya inundaciones.

“Vivir aquí es una condena”, relata una vecina mientras trata de sacar el agua de su sala completamente inundada, con muebles que tal vez deba de tirar o simplemente esperar a que se sequen con el transcurso de los días.

Lleva 20 años viviendo ahí y ya se acostumbró a esta clase de penumbras; “si no es una colonia apta para levantar casas, pues no la hubieran permitido nunca”, dice enojada, al tiempo de aclarar que les cobran todos los impuestos, pero nunca los ayudan.

Eloy Girón Reyes, jefe del Departamento Operativo de Protección Civil Estatal afirmó en entrevista que tras la tormenta que se dejó sentir desde la tarde de ayer las colonias más afectadas, además de la Carlos Salazar, fueron Prados Verdes, Las Margaritas, Tres Puentes, Jacarandas, Poliducto, El Realito, las inmediaciones del Estadio Morelos y calles específicas como la Poza Rica.

Se habilitó un albergue temporal que sin embargo no fue requerido por los ciudadanos, quienes prefirieron quedarse en sus hogares o irse con algún familiar. Relató que la mayoría de coladeras en la colonia estaban azolvadas por la basura, mientras que los canales también estaban a tope.

Reconoció que los recursos materiales y humanos de las autoridades “son insuficientes” para hacerle frente a la contingencia, por lo que pidió la paciencia de los moradores.

En tanto, Erick Caudillo Valdez, integrante de la Comisión Estatal de Protección y Riesgos Sanitarios (Coepris) prometió que la dependencia revisará si las casas cuentan con agua para uso y consumo humano, para lo cual harán muestreos y así evitar el riesgo de la presencia de bacterias.

El mayor riesgo para los vecinos en esta clase de contingencias se da cuando hay derrame de aguas negras y entra a los hogares, filtrándose a sus cisternas. Cuando eso ocurre, la Coepris hace actividades de fomento y saneamiento básico.

Finalmente, personal de Bomberos de Morelia informó que a lo largo del día se van a sanitizar las casas afectadas para evitar posibles brotes de enfermedades. En toda la ciudad hubo aproximadamente 400 hogares con daños materiales, pero sin pérdidas humanas.