Morelia, Mich. (OEM-Infomex).- Algunas personas parecen estar por siempre condenadas a fracasar en el amor, el mantener una relación estable o tan siquiera conseguir una, parece un reto imposible, por lo que, ante las adversidades, hay quienes han optado por diferentes opciones para conseguir el amor.
Embrujos, amarres, muñecos vudú, magia blanca y negra, son parte de lo que echan mano aquellos desesperados por encontrar o recuperar el amor y con ello, tener al ser querido lo más cerca posible.
El Sol de Morelia recorrió los lugares de esotería que abundan en la capital michoacana, conociendo las historias, las técnicas y los precios de conjuros de amor, así como qué tan efectivos son.
La primera parada fue el Mercado Independencia, con una tradición de más de 50 años, en este inmueble puedes encontrar lo que sea para atraer el amor.
En el puesto de hierbas y veladoras “Donnatelo”, la encargada Marisela Flores y su hijo Joaquín comercializan esencias, veladoras y especies de todo tipo para conseguir empleo, dinero, atraer la suerte y por supuesto el amor, insumos que reportan una alza en las ventas por la temporada del año.
Al preguntar por el producto con mayor demanda, la señora Marisela comentó que las veladoras con esencias son las más pedidas, por la simplicidad de la acción, así como lo el accesible precio de las mismas que son de 40 pesos, un poco de fe y el amor tocará tu puerta, antes de lo esperado.
“Estas cosas son por energías, si tú realmente lo crees, lo atraes, antes de prender la vela debes poner una foto de la persona amada, escribir su nombre por fuera de la vela, la prendes, recitas la oración que viene escrita ahí y esperas, (...) si funciona o no, depende la verdad de cada quien”, dijo.
Entre las variedades de esencias que se pueden encontrar está “Ven A Mí”, una vela de color rojo que se prende cuando buscas recuperar a un ser amado, mientras que las velas rosas denominadas “Chupa rosa” sirven para reavivar el deseo en pareja; las velas pueden no ser prendidas en presencia del ser amado, únicamente se necesita pensar en la persona amada para que ésta haga su efecto.
Continuando el recorrido, nos encontramos con la tienda de santería “Don Cosme”, en este lugar las pócimas están a la orden del día, el dueño Cosme Ortiz y sus trabajadores realizan las mezclas más potentes con químicos de diversas procedencias, dependiendo de la necesidad de los clientes.
Al cuestionarlo acerca de la receta más efectiva para el mal de amores, el comerciantes recomendó fervientemente las esencias con feromonas, aseguró que con “unas cuantas gotitas en conjunto con el perfume que se usa todos los días, el ser amado caerá rendidito”, aunque aconsejó, entre mayor convivencia con la persona deseada, más fuerte es el efecto.
No obstante, ninguno de los comerciantes pudieron relatarnos historias de éxito, en su caso Marcela Flores, mencionó que hay quienes han regresado a agradecerles por la buena venta, así como don Cosme comentó que nuevos clientes han llegado a su local por recomendación de otros amigos.
“Yo nunca lo he intentado, pero la gente todo el año está comprando, regresan, les dicen a sus amigos, a veces me siento como cupido, pero nunca me ha tocado ver una pareja que haya unido directamente”, acotó.
A razón de ello, acudimos con la señora Victoria Barreto, una mujer de 54 años que lleva más de 15 años de su vida haciendo limpias, amarres y conjuros de magia blanca, quien señala que la razón para que sus conjuros se hagan efectivos es la fe de quienes acuden con ella, además de las intenciones puras y sin malicia.
En entrevista, Victoria relató que ella no se considera bruja ni mucho menos un chamán, se describió como “un ser de luz, que acompaña en su camino a quienes buscan la luz, no juego con fuerzas que no conozco, pero ayudó a aquellos de buen corazón a encontrar o recuperar lo que anhelan”.
Para ella, cada caso es diferente, pero decir que existe una receta para el amor es completamente: erróneo, dice.
La ferviente creyente de estos rituales dio cuenta de algunos amarres “sencillos”, como el poner la foto del ser amado debajo de un vaso con agua y gritarle a la foto a través del vaso, el profundo deseo de amor, dijo que de esta forma, nuestras peticiones llegan de manera directa a los oídos del amor.
Victoria detalla uno de los amarres más fuertes que existen: el de la orina. Éste consiste en tomar la primer orina del día en un frasco de cristal, dentro del mismo frasco colocar una foto del ser amado junto con azúcar y tres clavos de fuerte olor, después envolver el frasco en una bolsa negra y esconderlo hasta que surta efecto.
El resultado de los trabajos de Vicky
La mayoría de sus embrujos o recomendaciones han surtido el efecto deseado por lo clientes, asegura Victoria; y como ejemplo pone a la señora Gabriela “N”, una ama de casa de 53 años que creía haber perdido al amor de su vida, tras perder comunicación con el hombre por más de cinco meses.
“Juan fue un hombre que yo conocí en un banco por casualidad, él tenía ranchos, vendía leche y cosas de animales, nos conocimos ya yo con mis hijos y él con los suyos, pero fue inmediata la conexión, después de varios problemillas que llegamos a tener, un día de la nada simplemente dejé de saber de él”, relató Gabriela
- ¿Qué fue lo que pasó con Juan?
“Lo que pasó, fue que él andaba en cosas raras, como de la maña y yo nunca me enteré; entonces, después del amarre que le hice con ayuda de Vicky, cinco meses después sonó el teléfono de mi casa, era Juan, estaba en la cárcel en Uruapan, me dijo que le daba pena confesarme lo que había pasado, pero que me extrañaba como nunca”.
Gabriela se fumaba un cigarro diario en el que escribía el nombre de Juan, por lo menos siete veces, de ahí como medida desesperada, Victoria Barreto le recomendó escribir en cada cara de un ajo, sus nombres juntos y entre los mismos, cruzar un par de agujas, para que sus caminos volviera a unirse.
Después, la señora Gabriela debía buscar una calle con cuatro esquina y tirar el ajo a la coladera, que él mismo siguiera su rumbo y si estaban destinados a ser. y así fue, el amor tocó a su puerta de nuevo, no obstante, los resultados no fueron los deseados.
“Al principio fue bonito, yo iba a verlo a la cárcel de Uruapan, nos amabamos, pero ahora ya no quiero saber de él y sé que está pronto a salir. Juan ya no sabe nada de mí, pero no dudo que le sea fácil encontrarme”.