MORELIA, Michoacán.-(OEM-Infomex).- Tras la crisis política que viven las fracciones parlamentarias luego de la votación extra de cuatro diputados inexistentes en la elección de presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) que se vivió el domingo anterior, Elvia Higuera Pérez, aspirante al cargo y quien venía manejándose como la ficha de Morena para encabezar el organismo, anunció su salida de este proceso de selección.
A través de un mensaje publicado en cuenta de Facebook, Higuera Pérez argumentó que su salida de la contienda se debió a “una muestra de la ética, congruencia e integridad” a su carrera profesional, asegurando que, en este proceso, existió violencia y discriminación “con saña y denigración” hacia su persona, por lo que a su parecer existe violencia política.
En las líneas escritas, la también integrante de la Comité de Participación Ciudadana (CPC) del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA), quien incluso asumirá en próximas horas la presidencia de éste, refirió que desde el Congreso del estado se generó “un discurso de odio contra mi persona” y que dijo, solo obedeció a intereses “obscuros, componendas y la voracidad” por obtener espacios en el organismo.
“Me retiro de esta contienda orgullosa de no haber traicionado mi ideología feminista, tal y como ésta es, plena en derechos y libertades para todos y todas, no a medias tintas, congruente con mi lucha por la justicia e igualdad social y con la legitimidad que me da el no tener ningún señalamiento por hechos de corrupción y deshonestidad”, escribió.
El domingo pasado, las comisiones legislativas presentaron ante el Pleno una terna, donde uno de los integrantes, entre ellos Elvia Higuera Pérez, debía alcanzar las dos terceras partes de la votación para ser el próximo ombudsperson, es decir 27 de 40 votos. Lo sorprendente fue que se contabilizó un total de 44 sufragios con lo que se inició una serie de conflictos entre las fuerzas parlamentarias.
Presentarán caso ante el observatorio de participación
En su oportunidad, la secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres (Seimujer), Nuria Gabriela Hernández Abarca, lamentó que –a su parecer- se pongan obstáculos cuando una mujer quiere acceder a un puesto de tal naturaleza, y sobre todo que se pronuncien sobre cuestiones personales.
Como presidenta del Observatorio Ciudadano de Participación Política de las Mujeres en Michoacán, Hernández Abarca adelantó que presentará el caso ante el resto de los integrantes, pues dijo que es una muestra de violencia política y discriminación por ideología.
“Yo solo vi cuestionamientos hacia ella no hacia los otros candidatos, por lo que seguramente habría que preguntarle sus posturas de su derecho a decidir, a lo mejor también tendrían algo que decir, es lamentable de cualquier forma que se vea (…) decir que ella apoya al aborto y por ello no puede llegar, me parece muy cuestionable ese señalamiento”, sostuvo la funcionaria estatal.
De ahí que al ser la Presidencia de la CEDH un cargo tan importante y se tiene la oportunidad de turnar al Pleno una nueva terna, Hernández Abarca pidiera que en ésta también esté integrada por una mujer, de lo contrario el principio de paridad no se estaría cumpliendo.
¿Qué es violencia de género y política?
De acuerdo al Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), la violencia de género es aquélla que se ejerce sobre las mujeres, cuya objetivo de la persona agresora es producir daño y conseguir el control sobre la misma, por lo que se produce de manera continuada en el tiempo y sistemática en la forma, como parte de una misma estrategia.
Mientras que de acuerdo a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la violencia política en contra de las mujeres por una cuestión de género es definida como todas aquellas acciones u omisiones de personas, servidoras o servidores públicos que se dirigen a una mujer por ser mujer (en razón de género), con el objeto o resultado de menoscabar o anular sus derechos político-electorales, incluyendo el ejercicio del cargo.