Morelia, Michoacán.-Sólo 30 segundos. Los observadores se sorprendieron pues ese tiempo parece poco, sin embargo, todos acatan la instrucción, pues de lo contrario la vista podría sufrir daños irreversibles. Aunque es sábado, las sedes programadas para ver el eclipse solar anular lucen llenas, la mayoría no quiere perderse el fenómeno que se vio por última vez hace 30 años.

Las filas son largas. Los rostros de los aficionados lucen misteriosos. La mayoría son jóvenes de entre 18 y 25 años. Hay niños que comen ansías. Hormigueros de gente se registran en En el Centro Cultural UNAM, el Planetario y la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) Campus Morelia.

"¡No, abuela, no lo veas así!" reclama el nieto mientras le entrega un cartón con un filtro especial. "No hijo, ya sé, no te preocupes", le regresa la señora. Mientras su familia disfruta del espectáculo ella dice que es la segunda ocasión que lo ve. Allá por los noventas, fue con su esposo a un campo y presenció cómo se empezó a oscurecer.

Era una lomita, fuimos para allá y muy increíble, una penumbra nos cobijó y luego las vacas comenzaron a echarse, creyeron que ya era de noche.

Sin embargo, a diferencia de hace 30 años, esta vez solo es visible 60 por ciento. Aunque en Yucatán y Veracruz se disfruta al 100 por ciento. Su punto máximo se registra a las 11:30 horas. La gente sigue impresionada. La abuela refiere que la mayoría de los asistentes son jóvenes porque no lo habían apreciado. "Estoy muy emocionado", suelta y da un brinco el nieto.

Las personas de mayor experiencia llevan sus instrumentos echos con sus propias manos, pero otros prefieren comprar las lentillas especiales que deben estar certificadas bajo el ISO 12312-2, su precio es de 80 pesos. En las sedes hay telescopios y también prestan dichos lentes.

Los organizadores repiten una y otra vez que deben observar solo 30 segundos cada cierto tiempo. Sin lentes de sol, sin filtros, sin cámaras porque las retinas tienen una especie de "neuronas" que pueden morir, causando daños graves.

Son las 11:30 horas, la fiesta astronómica es todo un éxito. En boca de todos sigue la palabra "eclipse", "asombroso", "increíble", "bonito". Es ciencia", dice un joven del staff. A diferencia de hace algunas décadas, los prejuicios por este tipo de fenómenos astronómicos son pocos. Los michoacanos están felices por observar aunque sea por 30 segundos, la maravilla astronómica.