Morelia, Michoacán-(OEM Infomex). -El secretario de Servicios Públicos, Ramón Baltierra Sánchez, informó que en el Centro Histórico existen alrededor de 65 comerciantes ambulantes, quienes violan el Bando Municipal, el cual estipula que no hay permiso de venta y comercio en la vía pública.

Según el secretario, para que puedan trabajar los ambulantes en las calles del primer cuadro, el cabildo moreliano tiene que reformar el Bando Municipal y hasta ahora ningún regidor se ha mostrado interesado en ello, opinó.

En entrevista, el secretario comentó que los comerciantes ambulantes han sido notificados de que no pueden trabajar en la vía pública y se les ha solicitado verbalmente el retiro voluntario de las calles.

“Cuando ellos calculan que los inspectores se movieron de lugar, regresan a los sitios de costumbre, que son: cerrada de San Agustín, Plaza de Armas, Melchor Ocampo y Benito Juárez; así como la calle Zaragoza y la Plaza Valladolid”, comentó el secretario.

El secretario explicó que los ambulantes prefieren derramar sus productos en la calle y hacer un escándalo para que sean grabados y ayudados por los ciudadanos, pese a que están enterados de que en el Centro Histórico está prohibido el ambulantaje.

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En el caso de la señora que vende elotes y que fue parte de la gresca que se generó el pasado martes en la cerrada de San Agustín, informó el secretario que se llama María Peña Nambo, quien se acompaña con siete miembros de su familia para vender diferentes productos en el primer cuadro.

“Después de que se retiran los inspectores, alrededor de 20 ambulantes, entre ellos la familia de María Peña, se vuelven a instalar sin permiso alguno”, contó el funcionario municipal.

Según el secretario, los inspectores tienen que seguir un protocolo de acción que fue creado para evitar confrontaciones con los ambulantes, ya que en cada operativo que realizan en el Centro Histórico son agredidos por los oferentes.

“La señora de los elotes les echó el agua caliente y eso no se dijo, uno de los inspectores le picaron la mano con un cuchillo”, indicó Baltierra Sánchez.

Por lo anterior, los inspectores se acompañan de un grupo de policías municipales, quienes son los encargados de mover la mercancía que los inspectores decomisó, la cual es resguardada en la Dirección de Mercados, donde los ambulantes pueden recuperarla a cambio de un pago por la sanción que se aplica, la cual es mil 400 pesos aproximadamente.