Morelia, Michoacán (OEM).- Aunque pareciera que para las autoridades los casos de desapariciones y asesinatos de sacerdotes son casos cerrados, para el obispo auxiliar de Morelia, Herculano Medina Garfias, aún hay cosas pendientes.
Aunque dijo no tener conocimiento de si la Iglesia Católica ha pedido que se reabran los casos de los presbíteros, lo consideró necesario principalmente en el caso del padre Santiago Álvarez, de la Diócesis de Zamora, pues hasta la fecha no se tiene dato alguno de su paradero.
“En el caso del padre Santiago de Zamora no se ha tenido absolutamente conocimiento de nada. Ni se ha encontrado su cuerpo, ni el vehículo en el que viajaba. Y hasta ahí se quedó, nadie dio informaciones de nada, pareciera como si se lo hubiera tragado la tierra a él y al carro. A ninguno han encontrado”, aseguró el prelado.
Añadió que tras la desaparición del sacerdote, la denuncia no fue atendida por las autoridades luego de que el obispo Javier Navarro recurriera a varias instancias del Estado. “No sé si él haya optado por dejar ya las cosas hasta ahí o tenga intención de retomar el caso”, señaló.
Indicó que no hubo registro de amenazas o extorsiones ni en el caso del padre Santiago ni en ninguno de los otros dos casos de desapariciones y asesinatos de presbíteros en el estado en los últimos años: el del padre Gerardo, de los Misioneros de la Sagrada Familia, de quien se registró su desaparición y asesinato; ni el del padre Alfredo, originario de Morelia, quien estaba en la Parroquia de Janamuato y apareció con impactos de bala en el Predio El Guayabal, único caso en que se informó la detención de dos personas presuntamente responsables por su homicidio.
Cuestionado sobre si miembros de la Iglesia han recibido amenazas por brindar apoyo a las Cuarta y Quinta Caravanas Internacionales de Búsqueda de Personas Desaparecidas, tal y como ya ha ocurrido con activistas que participaron ahí, incluido el caso fatal de Zenaida Pulido, indicó que no hay ningún reporte al respecto.
“Hasta el momento yo no he tenido conocimiento de que a alguno de los padres, por ejemplo el padre Juan Pablo o el padre Miguel Gaona, que están más involucrados con el tema de los Centros de Escucha les hayan en algún momento amenazado o condicionado algo. Si ya hubiese pasado yo creo que hubieran buscado la manera de hacerle saber al señor Arzobispo la situación”, indicó.
No obstante, buscadoras de desaparecidos manifestaron en lo corto que sí hay sacerdotes que han recibido amenazas tras el apoyo brindado a la Cuarta y Quintas Caravanas Internacionales de Búsqueda de personas Desaparecidas.