Morelia, Michoacán (OEM - Infomex).- Tal como se preveía, el nuevo desfile probatorio presentado por la Fiscalía General del Estado rebasó el tiempo disponible del Poder Judicial, por lo que habrá una segunda y tal vez hasta una tercera jornada para establecer la condena que habrá de pagar Diego Urik por el asesinato de Jessica González Villaseñor.
Por lo pronto, fueron cuatro peritos los que testificaron hoy ante el juez Ariel Montoya Romero, con los cuales se pretende ir sumando la cantidad económica que habrá de pagar el acusado como reparación del daño.
Primero se hizo pasar a dos psicólogas y una criminóloga, quienes hablaron sobre los daños causados a los familiares de la víctima, a quienes se les recomendaron terapias para conllevar el duelo.
También se analizó el perfil de Diego, al que se le ubicó como una persona egocentrista y que mostró actitudes violentas en sus primeros días en el penal de Mil Cumbres, lo que incluso orilló a cambiarlo a un área de máxima seguridad.
El momento más complejo de la audiencia se vivió cuando pasó la cuarta testigo, pues los agentes del Ministerio Público le informaron al juez que ésta fue abordada en la zona de espera por el padre de Diego, lo que consideraron una actitud atípica y fuera de norma.
Pese a ello, Montoya Romero dio cabida al relato que pronto se vio cortado ante el nerviosismo evidente de la mujer, quien se desempeña en el área de Trabajo Social de la FGE.
Con voz cortada y dubitativa, la perito solo respondió a la primera pregunta y tras ello los agentes desistieron de hacer más cuestionamientos, pero los abogados defensores aprovecharon la oportunidad y la acorralaron con preguntas teóricas que no supo responder.
Aunque al inicio la Fiscalía habló de 14 órganos de prueba, al final se informó que serán menos con el objetivo de concluir en la próxima audiencia, que será el 15 de febrero. Ello no garantiza que ese mismo día se conozca la sentencia, pues habrá alegatos finales y después el juez decreta un receso para analizar pruebas y réplicas.
De esta forma, lo más probable es que se necesite una tercera jornada en la cual ya solo participe el juez y entonces sí se sepa el tamaño de la sentencia.
El ya culpable Diego Urik ratificó que, al igual que hoy, desea presenciar la próxima cita de manera remota, conectado desde el penal.