Reprueba gobierno de Silvano Aureoles en finanzas

De acuerdo con una información del Instituto Mexicano para la Competitividad ha sido la administración con menos recursos generados y más pago de deuda

César Abrego

  · martes 29 de octubre de 2019

Foto: Fernando Maldonado

MORELIA, Michoacán.- (OEM-Infomex).-Como el de mayor opacidad, el que menos recursos propios genera y el que más intereses paga por el servicio de la deuda pública respecto de los recursos que recauda se posicionó al gobierno de Silvano Aureoles Conejo a nivel nacional.

Conforme a los datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) dentro del Informe sobre el Índice de Información Presupuestal Estatal 2019 (IIPE) se muestra una radiografía de los estados en cuestión de finanzas públicas y en el cual, Michoacán obtuvo los peores resultados.

El IIPE 2019 detalla que Michoacán está en el último peldaño por debajo de las otras entidades del país respecto a la información financiera, pues el grado de rendición de cuentas en promedio fue de 84 por ciento.

Michoacán comprobó sólo 45.7 por ciento de su gasto público, cuya tendencia estatal se ha mantenido por debajo de la media nacional, obteniendo en los últimos años un mínimo del 37 por ciento (2010) y el más alto de 52 puntos porcentuales (2015).

Tabuladores salariales y plazas, deuda pública, rubros específicos, poderes y dependencias, y municipios son los apartados en donde el estado ha incumplido y por ello obtuvo una calificación reprobatoria. No así para la presentación de la Ley de Ingresos y los recursos federales, en donde resultaron evaluados con un 100 por ciento.

Por lo que toca al monto de recursos recibidos en este 2019, Michoacán ha ingresado 70 mil 17 millones de pesos, de los cuales 65 mil 727 millones, es decir el 94 por ciento, han sido de procedencia federal, resultando entonces que la entidad sólo tiene capacidad para generar ingresos por el orden de los cuatro mil millones de pesos, monto insuficiente para cumplir siquiera con el pago de la nómina educativa anual.

Al consultar al presidente del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán (CEEM), Rodolfo Aguilera Villanueva, éste reconoció que la entidad tiene un gobierno que no genera ingresos propios, toda vez que por cada peso, seis centavos son producto de impuestos y el resto de transferencias federales.

Foto: Fernando Maldonado

“Tenemos un sistema fiscal sin la capacidad de generar ingresos propios para financiar el gasto público (…) un estado incapaz en términos de recaudación fiscal”, indicó.

De ahí que, desde su óptica, existen tres opciones para eficientizar la generación de recursos propios: a) ampliar la base tributaria, ejemplo, hay una gran cantidad de vendedores ambulantes que no pagan impuestos o empresas que los evaden; b) regularizar el cobro de gravámenes en todos los órdenes de gobierno; y c) crear una política pública que permita el ingreso de empresas industriales para aumentar la recaudación tributaria.

Por cuanto a las obligaciones fiscales del estado, según el Imco, para el segundo semestre del 2019 Michoacán habría destinado 18 mil 970 millones de pesos por el servicio de pago de la deuda pública, 45 por ciento más que los ingresos propios anuales, monto que, además, ocupa el 4.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) estatal, cuando lo óptimo es de uno a dos puntos porcentuales.

Reporte que también evidencia cómo en los últimos cuatro años de la actual administración silvanista ha crecido el monto de intereses de la deuda pública en relación los mandatos del ex perredista Leonel Godoy Rangel, y los priístas, Fausto Vallejo Figueroa, Jesús Reyna García y Salvador Jara Guerrero, conforme a la información siguiente:

En 2015 se pagaron 19 mil 170 mdp; 2016, 22 mil 665 mdp; 2017, 21 mil 051 mdp; 2018, 19 mil 872 mdp. Mientras que en 2009 se destinaron al pago de intereses de la deuda 10, 117 mdp; 2010, 12 mil 394 mdp; 2011, 18 mil 981 mdp; 2012, 18 mil 555 mdp; 2013, 17 mil 911 mdp; y 2014, 19 mil 218 mdp.

Situación que, a decir de Aguilera Villanueva es un desperdicio de recursos en el pago tan sólo de intereses por servicio de la deuda, lo cual conforme al reporte del PIB, financieramente revela que por cada 100 pesos, cuatro se destinan a dicho compromiso y que atribuyó a la aplicación de políticas fiscales erróneas.