Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El estado de Michoacán se ubica a nivel nacional como la quinta entidad con mayor biodiversidad, ya que debido a su ubicación geográfica, la gran diversidad de climas, suelos y elementos fisiográficos, se conforman al menos 20 tipos de ecosistemas en este territorio.
De acuerdo a los datos proporcionados por la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial (SEMACCDET), los ecosistemas que más se destacan son el bosque de coníferas, bosque de encino, bosque mesófilo de montaña, selvas (medianas y bajas) y manglares.
De ahí que se derive que el estado cuente actualmente con 14 mil 684 especies, de las cuales, 301 se consideran endémicas. Asimismo, Michoacán se ubica entre los 10 primeros estados en riqueza de especies en los siguientes grupos: reptiles con 165, mamíferos con 163, anfibios con 56 y aves con 563.
Por otra parte, el último reporte indica que en la entidad se registran 52 áreas de conservación distribuidas en todas las regiones, sumando de esta manera un total de 67 mil 675.49 hectáreas. De este universo, 30 son las Áreas Naturales Protegidas (ANP), 9 las Zonas de Restauración y Protección Ambiental y 13 las Áreas Voluntarias para la Conservación.
No obstante, la SEMACCDET también ha alertado sobre el riesgo al que se ha visto sujeto los recursos naturales en los últimos años, principalmente por las actividades humanas no sustentables, sobre todo en la pérdida de biodiversidad y degradación de los ecosistemas.
Sobre este punto, la dependencia estatal expone que las cinco causas directas de pérdida de biodiversidad son: pérdida y degradación de los ecosistemas, sobrexplotación de especies, presencia de especies exóticas invasoras, cambio climático y contaminación.
Si bien el deterioro ambiental se manifiesta de diversas formas, el cambio de suelo es una de las principales causas, ya que esta actividad conlleva una disminución de la cobertura vegetal y en la calidad de los ecosistemas; esto implica una disminución de especies animales y vegetales útiles al hombre.
Los ecosistemas más impactados en los últimos años, son los bosques de pino, pino-encino, encino y bosques mesófilos de montaña. Las causas principales es la tala ilegal, incendios forestales y cambio de uso de suelo; actualmente estos bosques han disminuido considerablemente su distribución debido a la introducción de huertas de aguacate.
De la misma forma, los dos grupos que han ocasionado más problemas ambientales en Michoacán son las plantas acuáticas y los peces de agua dulce. Las primeras, como exóticas invasoras con sus abundantes poblaciones han generado un sinfín de problemas en los cuerpos de aguas naturales y artificiales, tal es el caso del lirio acuático.
Con relación a los peces de agua dulce, se reportan 20 especies introducidas, cinco de ellas con potencial invasor: pez diablo, perca, lobina negra, carpa y trucha arcoíris. Los biólogos de la SEMACCDET precisaron que aunque la entidad alberga importantes reservas de agua dulce, se ha identificado un severo grado de contaminación en algunas de las principales cuencas hidrológicas, como las regiones tributarias del Río Balsas y del sistema Cutzamala, lo que se debe principalmente al crecimiento urbano de la entidad, la expansión urbana y desarrollo de actividades agropecuarias.
Otros ecosistemas en riesgo son los manglares, ya que se han reducido de forma drástica debido a la desecación de las lagunas costeras, esto como producto del desarrollo de complejos urbanos, puertos o zonas turísticas. Las especies de mangle negro, mangle botoncillo, mangle blanco y mangle rojo se consideran actualmente amenazas de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana (SEMARNAT 2010).
Los principales problemas ambientales de la zona marino-costera están asociados a la incompatibilidad de los usos del suelo y a la falta de una racional y eficaz planificación ambiental urbana que controle, mitigue y maneje la contaminación generada por las actividades terrestres y su efecto sobre la población, los ecosistemas y recursos naturales localizados en la franja marino-costera.
En lo que se refiere al agua subterránea, el grado de contaminación actual de los sistemas acuáticos en el estado se debe a las descargas de aguas residuales de tipo doméstico e industrial, a la lixiviación de compuestos inorgánicos de zonas agrícolas y frutícolas, así como a la contaminación orgánica aportadas por las actividades pecuarias y piscícolas.
Dentro del rubro de selvas y bosques, para Michoacán la tasa de deforestación es de 1.8% y 1%, respectivamente, el doble de lo que se reporta para el país. Una de las causas principales de la deforestación se debe al desmesurado avance de la producción aguacatera.
Pese a los riesgos en que están los recursos naturales, los especialistas apuntan en el reporte los privilegios de la entidad en sus zonas fisiográficas, las cuales se dividen en la Llanura costera, Sierra Madre del Sur, Depresión del Balsas-Tepalcatepec, Sistema Volcánico Transversal y Altiplanicie.
De igual forma, se destaca la riqueza en los lagos de Chapala, Pátzcuaro, Zirahuén, Cuitzeo y la laguna de Zacapu.