Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- “Acción que es tan arriesgada que puede causar graves perjuicios a quien la realiza”, tal es el significado de la palabra suicidio de acuerdo con la Real Academia Española y que, sin embargo, no es del todo exacta.
El suicidio no sólo afecta a quien lo realiza llevándolo hasta la muerte, sino que afecta a todo el entorno social, iniciando por su círculo más cercano, es decir, su familia y amigos.
Te puede interesar: De enero a junio de este año, 169 suicidios en Michoacán: Colegio de Psicólogos
“Después de que un familiar se suicida ya nada vuelve a ser lo mismo. Queda el sentimiento de culpa, de que si se pudo hacer algo y no se hizo, de por qué no se percibió a tiempo la intención”, afirmó Josefina Castro, quien hace menos de un año perdió a un hijo.
“Ese día desayunamos juntos, después de que el grupo de jornaleros con los que iba a viajar a Sinaloa para la cosecha de jitomate lo dejaron. Estaba triste, pero nada fuera de lo normal. Después de que se acabó sus chilaquiles se fue a su cuarto y fue todo”, platica al recordar su tragedia.
Asegura no haber escuchado nada, no haber sospechado nada y no haber percibido nada ni en ese momento ni días antes.
“Cuando acabé de lavar los trastes fui a su cuarto para preguntarle qué quería de comer y lo encontré ya sin vida”.
El joven de apenas 22 años de edad se llevó con él los sentimientos y motivos que lo llevaron a tomar la decisión. Imposible imaginarlo o poderlo saber, pues según su mamá no había signo alguno que pudiera indicarle que estaba por tomar esa determinación.
“No noté nada, absolutamente nada, quien sabe si hubiera podido hacer algo si hubiera sabido”, se lamenta.
En Michoacán, de manera curiosa, la mayoría de los suicidios son cometidos por hombres.
De acuerdo con estadísticas del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), el número de suicidios en hombres cuadriplica los registrados entre mujeres. Muestra de lo anterior es que, en el 2021, de 330 suicidios, 273 fueron cometidos por hombres y 57 por mujeres.
Otro dato revelado por la dependencia es que el ahorcamiento, estrangulamiento o sofocación representa la forma más común de quitarse la vida, muy arriba del envenenamiento o los disparos de arma de fuego.
Los datos disponibles sobre este tema más recientes del Inegi datan del 2019, 2020 y 2021 en donde el promedio anual se mueve poco.
En el 2019 se registraron 334 suicidios, de los cuales 267 fueron hombres y 67 mujeres; en el 2020, 375, siendo 306 hombres y 69 mujeres y finalmente en el 2021, 330, se los cuales 273 fueron hombres y 57 mujeres.
El rango de edad en el que predomina el fenómeno va de los 25 a los 29 años y en el estado, de manera específica, son Morelia, Uruapan y Zamora los municipios con mayor número de casos.
Las causas no son motivo de las estadísticas; esas corresponden a un área tal vez menos específica como es la psicología.
De acuerdo con la psicóloga Araceli Reyes Maldonado, las razones que pueden llevar a quitarte la vida son variadas y pueden derivar de situaciones económicas, amorosas o incluso patológicas y de adicciones. Aunque la mayoría tienen como punto en común, un factor desencadenante: algo pasa que facilita la determinación.
Ansiedad y depresión son las principales alertas, pero tampoco representan un patrón por lo que habrá suicidas que no las presenten o no la exterioricen; lo que sí es un hecho es que el suicidio puede prevenirse.
Los focos de alarma para sospechar que alguien presenta depresión, ansiedad o que puede estar en una fase que puede desencadenar en suicidio es que por lo menos durante dos semanas la persona presente tristeza y anhedonia –es decir, que pierde el interés en realizar actividades que anteriormente eran placenteras o llamaban su atención–.
Otros síntomas cognitivos se asocian a la percepción que se tiene de uno mismo, de las personas que se encuentran alrededor, del mundo o del futuro, ya que solo se consideran cosas y experiencias negativas y se tiene un panorama de desesperanza.
También se pueden presentar síntomas físicos como menor energía, falta de concentración, alteraciones de sueño y del apetito que se puede ver reflejado en la variación del peso corporal durante el último mes. Lo más importante, a decir de Reyes Maldonado, es prestar atención a estos síntomas y quitar el estigma de recibir atención psicológica.
Es importante señalar que el 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio
