Morelia, Michoacán, (OEM-Infomex)El obispo auxiliar de Morelia, Herculano Medina Garfias, aclaró que la celebración del “Día de la Candelaria” la Fiesta de la Luz, la cual se lleva a cabo cada 02 de febrero, es el recordar la Presentación del Señor o la Purificación de la Virgen, la cual celebran los creyentes católicos.
Indicó que los gastos que realizan los feligreses en vestir a los niños Jesús, es una costumbre y una tradición que ellos realizan y ellos deciden realizar, “la iglesia no los obliga a que gasten o realicen una costosa compra para que sean estos los niños, por lo que ellos tienen la libertad de hacerlo como mejor lo decidan, pero sí es diferente a lo que lo hace la iglesia”.
Así lo expresó luego de cuestionarle y solicitar su punto de vista sobre los lujosos y costosos trajes que realizan las personas para los “Niños Dios” que son llevados y presentados en la iglesia católica, en el que incluso ahora en día son personalizados con diversas temáticas o personajes públicos.
“El realizar este tipo de costumbre y que metan otros personajes está desvinculado que lo hagan, porque eso no es lo que nosotros celebramos”.
Explico que la está festividad representa la presentación e Jesús en el templo de Jerusalén y la purificación de la Virgen después del parto; en dicha época se acostumbraba que madre e hijo permanecieran encerrados hasta 40 días después de su nacimiento, esto permitía a las madres reponerse y purificarse, cuando llegaba el día, los niños eran presentados en la iglesia junto con alguna ofrenda.
Historia de la presentación de los “Niños Jesús” en la iglesia
Se cuenta que cuando María llevó en brazos a su hijo recién nacido aquel 02 de febrero, el sabio Simeón, un hombre devoto de Dios y quien esperaba ver al Mesías antes de morir, lo tomó en sus brazos y bendijo.
“Mira, este niño está destinado a hacer que muchos en Israel caigan y muchos se levanten. Será un signo de contradicción que pondrá al descubierto las intenciones de muchos corazones. Pero todo esto va a ser para ti como una espada que te atraviese el alma".
Simeón consideró que Jesús representaba "la luz que iluminaría a los gentiles y que sería la gloria de Israel"; por lo que el nombre Candelaria viene de "candelas o velas", las cuales representan la luz de Cristo que tanto pronunciaba.
Por lo tanto se acostumbra a "levantar" del pesebre a la representación que tengan del Niño Jesús, y vestirlo para llevarlo a bendecir al templo; lo que se cree es que comienza el inicio de una celebración católica y continúa con las festividades de Cuaresma y Semana Santa.
Existen muchas teorías sobre su origen, algunas se remontan en el Oriente, pero explican que se extendió al Occidente en el Siglo VI. Algunos historiadores incluso consideran que sus inicios se dieron en la antigua Roma.
En los países latinoamericanos se dice que el Día de la Candelaria es una herencia transmitida por los españoles en la época de la Conquista, la cual venera la aparición de la Virgen de la Candelaria en las islas Canarias, la cuál es venerada con una procesión de velas.