Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM) ya prepara diversas movilizaciones en torno al 12 de octubre. Pese a no precisar qué tramos carreteros obstaculizará ese día, el vocero Pavel Ullianov Guzmán anunció que al menos serán siete entronques donde no se permitirá el flujo vehicular como forma de protesta.
En entrevista, Ullianov Guzmán aseguró que dentro de las movilizaciones que tendrán para el martes 12 de octubre, Día de la Hispanidad y antes conocido como Día de la Raza, está el bloqueo de entronques carreteros, empero, descartó en especificar los lugares, al decir que luego se alerta a las autoridades estatales y los granaderos llegan con anticipación a las protestas que se dan en torno de las comunidades indígenas.
Aunado a ello, descartó que el Consejo tenga alguna expectativa respecto del trabajo que realice la Comisión Estatal para la Atención a Pueblos Indígenas del estado, ya que consideran que esa dependencia es un elefante blanco que se acaba el presupuesto en gasto operativo y pago de salarios. “Las 500 comunidades indígenas que conforman el estado nunca son atendidas, mucho menos se les resuelven sus necesidades”, indicó.
El activista agregó que no tienen esperanzas en dicha comisión, “queremos una mesa directa con el gobierno del estado y el gobierno federal”, sostuvo.
Por ende, el CSIM no propondrá ningún perfil para que ocupe la titularidad de la dependencia. No obstante, asentó que sí pedirán que sea alguien de las comunidades indígenas, que hable el idioma, “estaríamos exigiendo al gobierno del estado, ya sea con el gobernador o el secretario de Gobierno, la mesa de diálogo. No vamos a entrar al juego con la comisión porque no tiene atribuciones y no tiene presupuesto”.
Irán contra Monumento a los Constructores
En el marco del próximo 12 de octubre, el CSIM ha reafirmado su deseo porque se retire la escultura denominada “Los Constructores”, creación de José Padilla Retana ubicada sobre el Acueducto de la capital michoacana.
Fue el 1 de agosto cuando integrantes de este grupo y otros ciudadanos se organizaron para hacer una consulta pública donde se preguntó si la gente deseaba el retiro de esta escultura, con una respuesta positiva en la que participaron 905 personas, 807 de las cuales se inclinaron a favor de removerla.
En su momento, argumentaron que el trabajo artístico “va más allá de representar a quienes contribuyeron a edificar el Acueducto de Morelia a través de su trabajo, oficio y arte”, pues la obra retrata históricamente el periodo de la colonia para los pueblos indígenas, lo que representa “una sociedad de castas, racista y opresora, convirtiendo a esta escultura en un símbolo de racismo y esclavitud”.
Pavel Ullianov argumentó que dicha consulta a los pueblos originarios sí es vinculante, pues así lo establece la Ley de mecanismos y participación ciudadana del estado, por eso le exigirán al ayuntamiento encabezado por Alfonso Martínez Alcázar, que cumpla con ese compromiso, que sin embargo fue adquirido por la administración de Humberto Arróniz Reyes, alcalde que sustituyó a Raúl Morón Orozco.
Al respecto, el artista José Padilla Retana ha dicho que las pretensiones por quitar su obra obedecen a temas políticos de coyuntura, toda vez que desde su punto de vista la obra es un homenaje a aquellas personas que hicieron de Morelia un monumento.