Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).-Un colaborador de la radio comunitaria Erandi, con sede en Tangancícuaro, denunció ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) haber sufrido abuso policial en la ciudad de Zamora, donde elementos municipales lo golpearon y lo dejaron encerrado por casi cinco horas.
En entrevista, relató que la noche del 24 de junio acudió a un bar de esa ciudad en compañía de un amigo y al salir buscaron un establecimiento para cenar. Fue en el trayecto de la avenida Juárez cuando detectaron que había un operativo policiaco, por lo que siguieron caminando por otra calle pero una patrulla los siguió para marcarles el alto. Además de revisarlos a ellos dos, hubo un hombre de la tercera edad que también fue retenido e inmediatamente golpeado, lo que llamó la atención de los jóvenes que pidieron detener la agresión.
Eso bastó para que los tres fueran subidos a la patrulla, que los trasladó a barandillas y en donde dos de ellos estuvieron incomunicados por cinco horas, pues no le proporcionaron su celular para que marcaran al teléfono de un pariente.
En ese lapso, el comunicador cuyo nombre se omite por seguridad, no tuvo acceso a medicamentos, dado que padece diabetes. Finalmente pudo llamar a su madre, a quien la policía le informó que su hijo fue detenido al participar en una riña callejera, en estado de ebriedad y con rastros de droga, lo que niega rotundamente, además de que no le practicaron ningún examen toxicológico para comprobarlo.
Cuando su padre acudió a pagar la multa nadie le dio información y no fue hasta las 10:00 de la mañana que lo dejaron en libertad.
Sobre los hechos, la CEDH emitió una queja de oficio e inició la investigación correspondiente, solicitando un informe al área de Seguridad Pública de Zamora. Los policías podrían ser culpables de violar el derecho a la legalidad y seguridad jurídica, consistente en no ser sujeto a una detención ilegal.