Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Camilo Flores dice que con el paso de los años ha dejado de sentir. Para comprobarlo, se da unas cachetadas en la mejilla izquierda. “Mira, mira”, explica mientras retumban los golpes en su rostro. Tiene 70 años de edad y es un huésped más del albergue Cristo Abandonado.

No le gustan las cámaras, pero sí conversar. Relata que estuvo a punto de sufrir una embolia y que por eso su cara ya no es la misma. Originario del municipio de Zacapu, dedicó la vida a la producción de pan, hasta que los años le fueron ganando y la crisis lo alcanzó. De su familia solamente le sobrevivía una hija, pero ésta ya falleció. No da más detalles, pero a partir de ese momento quedó a la deriva y fue a dar al albergue.

Convive con otros 45 adultos mayores que actualmente viven en Cristo Abandonado. La mayoría de las personas que se encuentran aquí fueron abandonadas y olvidadas por sus familias. Hay quienes no pueden valerse por sí mismos y requieren de un asistencialismo por el resto de sus días.

Camilo asegura no sentirse triste, dice que los tratan bien, que no hay motivos para estar cabizbajos. “Aquí nos hacen fiestas, nos traen pastel y hasta regalos hemos recibido, no podemos estar en mejor lugar”.

Camilo habla con Víctor Manuel Rivas, su amigo y compañero de 68 años de edad. Hablan de todo y nada. Su conversación cambia radicalmente en instantes. Pasan de las anécdotas, a la comida del día y a los pajarillos que andan revoloteando por el patio.

Por momentos se pierde, es complicado descifrar cuando lo que cuenta es real o simplemente se tratan de desvaríos mentales. Pasa de la producción del pan a los tiempos en que fue herrero. No importan mucho las historias, Camilo y los demás solamente quieren ser escuchados, tener con quien pasar las horas. Sonríen si los visita algún desconocido.

Despojo: el delito más cometido contra el adulto mayor

Datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) arrojan que en 2018 el 57 por ciento de las denuncias interpuestas por adultos mayores en el país fueron por delitos patrimoniales, ya sea porque les fue arrebatada su pensión como jubilado, ahorros, bienes y/o propiedades por parte de sus familiares o conocidos.

De acuerdo al Consejo Estatal de Población (Coespo) en Michoacán residen poco más de 554 mil adultos mayores en la entidad, que basado en esta información se estima que en el 11 por ciento de los hogares vive al menos un adulto mayor.

A decir de la directora de Coespo, Elizabeth Juárez Cordero, la violencia en la vejez de una persona comienza cuando se estigmatiza por su condición y se asume que la vejez es decadencia, dependencia y fragilidad, lo que implica “un maltrato y una discriminación para los adultos mayores”, refirió al recordar que cada 15 de junio se busca concientizar por el Día Mundial contra el Abuso y Maltrato en la Vejez.

Según datos de la Coespo, el 25 por ciento de la población adulta mayor no sabe leer ni escribir, lo que los hace más vulnerables a ser defraudados y despojados de su patrimonio en la edad adulta mayor.

Mientras que la CNDH refiere que el 17 por ciento de los adultos mayores dijeron sufrir violencia familiar, ocho por ciento por lesiones, cinco por ciento por amenazas y el cuatro por ciento fue por homicidio; Juárez Cordero explicó que en la gran mayoría de los casos de violencia no es denunciado, ya que la dependencia para moverse está sujeto a su propio agresor.

Según la última Encuesta Nacional de Discriminación que realizó en 2017 el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) el 60 por ciento de los adultos mayores dijeron sentir alguna discriminación por su condición de adulto mayor, 82 por ciento de los encuestados respondieron que las personas principalmente sus familiares se desesperaban con ellos y el 24 por ciento de los encuestados respondieron que se les han negado sus derechos básicos entre ellos salud, vivienda digna, trasporte y alimentación.

En la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo que contemplo el primer trimestre del 2019 sólo el 18 por ciento de la población adulta mayor no activa cuenta con una pensión, 61 por ciento realiza quehaceres domésticos que puede ser contemplado como una contribución al hogar cuando es una actividad voluntaria.

La funcionaria indicó que la entidad ocupa el tercer lugar con mayor número de propiedades ejidales que son trabajadas por mujeres adultas mayores principalmente por haber enviudado.

Por su parte la directora del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Michoacán, Rocío Beamonte Romero, en lo que va del año, cerca de 20 denuncias por descuido al adulto mayor fueron recibidas ante la dependencia.

Por último, dijo que los apoyos dirigidos a los adultos mayores que la dependencia estatal proporciona son enfocados a las solicitudes que se hagan al DIF entrega sillas de ruedas, aparatos auditivos y médico a tu casa para aquellas personas que están imposibilitadas a salir de su domicilio.