MORELIA, Michoacán.- (OEM-Infomex).- Pese a las acusaciones vertidas en su contra por presunta tortura y abuso de poder, y el procedimiento de recomendación en curso por parte de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), el subsecretario de Seguridad Pública de Michoacán, Roberto Delgado Castellanos, aseguró que dicha información es totalmente falsa y “no se tiene conocimiento exacto del tema” el cual, dijo, “ya está archivado y no se dio”.
En su defensa, Delgado Castellanos declaró públicamente que a raíz de la información publicada por El Sol de Morelia y otros medios de comunicación se hizo la aclaración pertinente en “donde está la realidad”, la cual, según dijo “es que esas personas eran unos secuestradores y los sentenciaron a 30 años, se dedicaban a cortar dedos y están relacionados en cinco carpetas de secuestro”. Rechazando, un tanto nervioso ante el cuestionamiento que, en ningún momento hubo tortura.
Lo anterior, luego que la CEDH confirmara haber recibido la queja en donde un hombre que fue detenido en Baja California, acusó al ahora subsecretario de Seguridad de actos de tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes en contra de él y su familia, pues vestido de civil y sin presentar ninguna insignia que lo identificara como policía ministerial, irrumpió junto con otros sujetos al hogar del denunciante, golpeándolo a él y a su esposa, mientras que a su hermana la amenazaron con armas de fuego que ponían en su cabeza.
Información que sale a luz pública luego que su antecesor en el cargo, Carlos Gómez Arrieta decidiera renunciara a la subsecretaría de SP tras haber sido evidenciado en un vídeo que lo vincula a un caso de tortura en los hechos de Ayotzinapa, en 2014.Por su parte y al ser cuestionado sobre el pormenor, José Martín Godoy Castro, titular de la Secretaría de Seguridad Pública en el Estado, afirmó que dicho caso ya está cerrado, argumentado que Delgado Castellanos no dirigía la investigación en contra del supuesto secuestrador, por tanto no hay validez en su declaración y denuncia ante la CEDH.
En esta caso fue una orden de aprehensión que emitió el juez y fueron los compañeros a ejecutarlo de tal forma que eso generó cierta inconformidad de la institución en Baja California (…) pero ahora con el nombramiento sacaron a la luz este asunto