El alcalde de Zinapécuaro, Alejandro Correa Gómez, se negó a tocar ante los medios de comunicación temas relativos a la inseguridad en su región, donde hace algunos meses se vivió una masacre en un palenque ubicado a solo unas cuadras del Palacio Municipal.
En el marco de la entrega de recursos por el programa La escuela es nuestra, dijo que no corresponde a su administración la aprobación de licencias para el funcionamiento de establecimientos como El Paraíso, el lugar de pelea de gallos donde fueron asesinadas 20 personas la madrugada del 28 de marzo.
Tampoco quiso abundar en la detención de 34 personas en la región oriente del estado, a unos 50 kilómetros de su municipio, y se remitió a decir que es una tarea de las autoridades competentes. A la pregunta de cómo palpa la inseguridad en Zinapécuaro, desvió la conversación para afirmar que "el cambio debe de venir de todos".
Añadió que es responsabilidad de los padres de familia formar "hijos de bien", y negó que sea su responsabilidad aprobar incluso los boletajes para eventos nocturnos que impliquen algún riesgo.
Finalmente, también evadió la pregunta de supuestos actos de crueldad animal encabezados por su administración, como lo han denunciado asociaciones como Ghapad, Adoptamor, Andanzas Perrunas, Adóptame Zinapécuaro, Abogados Animalistas de México y Zi-Can.