SILVIA HERNÁNDEZ GONZÁLEZ
El Centro Histórico de Morelia, Patrimonio Cultural de laHumanidad, se sumó al cúmulo de expresiones vivas para enaltecera una de las tradiciones michoacanas con mayor arraigo, misticismopuro y religiosidad: rendir culto y respeto a los fieles difuntoscon ofrendas, altares y tapetes monumentales, integrados con todoslos elementos a la usanza purépecha.
En una labor de días bajo la lluvia y el sol, por momentos confrío y otros con un ambiente cálido, grandes contingentes detrabajadores del Ayuntamiento de Morelia, dirigidos pordependencias como Servicios Municipales y Secretaría de Turismo,así como por estudiantes adscritos a escuelas de nivel mediosuperior y superior, lo mismo prestadores de servicios y negocios,se sumaron a esta labor de adornar plazas, jardines, andenes,fuentes, pasajes, fachadas e interiores de inmuebles coloniales yedificios históricos.
El corazón de la Ciudad de la Cantera Rosa, la antiguaValladolid, se inundó de la oleada amarilla dorada delcempasúchil, de olor intenso que evoca a quienes ya partieron;retorno anunciado por la mariposa monarca, catalogada como laportadora de ánimas, que justo comienza a arribar a los bosquesmichoacanos del Oriente en estas fechas, donde hibernará cuatromeses.
Con la tradicional flor, aunado a la mano de león o morada,papel picado, frutas, panes de muerto, cirios y veladoras,fotografías, bebidas, vasijas de barro, figuras de bulto convestimenta indígena, se reunió a los elementos y materialesprincipales de altares y ofrendas que son admiradas y reconocidaspor miles de morelianos, visitantes y turistas que desde mediasemana arribaron a la capital michoacana.
Espacios como las Plaza de Armas, Benito Juárez, Melchor Ocampoy Villalongín, Fuente de Las Tarascas, Calzada Fray Antonio de SanMiguel, Cerrada San Agustín, así como balcones de la AvenidaMadero, edificios del Colegio Nacional y Primitivo de San Nicolásde Hidalgo, Antiguo Palacio de Justicia, centros educativos delCentro Histórico dedicaron sus espacios a la tradiciónpurépecha.
La Plaza Valladolid lució también a la alfombra monumentalParakata “Portadora de almas”, elaborada por 80artesanos y artistas de Huamantla, Tlaxcala, en una superficie depoco más de dos mil metros cuadrados, la cual estará enexhibición hasta el domingo 4 de noviembre.
REPRESENTATIVIDAD
El Día de Muertos es una de las tradiciones mexicanas con mayoralcance; en 2003, la UNESCO consideró esta celebración comoPatrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad. Michoacán es uno delos estados más reconocidos por la tradición y costumbre dehonrar los muertos, desde épocas prehispánicas.
CADA ELEMENTO, UN SIGNIFICADO
Los altares y ofrendas tienen un significado propio; los nivelesdel altar de muertos representan los estratos de la existencia. Porejemplo, un altar de dos niveles simboliza la tierra y el cielo;los de tres niveles incorporan el inframundo o purgatorio.
Un altar de siete niveles simboliza los pasos necesarios paradescansar en paz; este tipo de altar es el más tradicional.
Fotos: A quien se dedica la ofrenda y se le recuerda de unamanera especial.
Agua: Es el reflejo de la pureza y ayuda a saciar la sed deldifunto que viene de un largo camino.
Veladoras y cirios: Es la luz, la fe y esperanza que guía entreeste y el otro mundo.
Cempasúchil: Por su color y olor, lleva a las almas hasta suhogar de descanso.
Alhelí y nube: Por su pureza y ternura acompañan el alma delos niños.
Arco: Representa la entrada al inframundo.
Cruz: Elemento que forma parte de la evangelización.
Pan: La fraternidad.
Alimentos: La comida que gustaba en vida el difunto.
Calaveritas de azúcar: Representan a la muerte que siempreestá presente.
Sal: Elemento purificador que ayuda al cuerpo a no corromperseen su trayecto.