MORELIA, Mich.- “Es tan bueno un taco de frijoles como una langosta o un caviar, ¿por qué un taco de frijoles no puede ser gourmet? ¿A poco no sabe muy bien una tortilla aplaudida de las cocineras tradicionales?, Morelia en Boca reúne lo mejor en vinos, productos, chefs y cocineras, el resultado es extraordinario”, así reflexionó en entrevista exclusiva para El Sol de Morelia Fernando Figueroa, uno de los dos directores del Festival Internacional de Gastronomía y Vino Morelia en Boca, el cual tendrá su novena edición del 17 al 19 de mayo, en la Casa de la Cultura, en un horario de 12:00 a 19:00 horas.
La edición del año pasado contempló como temática los mercados, en esta ocasión es turno de la comida popular y callejera, por ello el director afirmó que el festival a través de los años ha querido darle la relevancia a cada uno de los participantes, productores, enólogos, chefs y cocineras, quienes dan lo mejor de sí para llevar los platillos a la mesa, “ha ido cambiando para recordarle a todo el mundo que es tan gourmet un buen taco de cabeza de la esquina de la calle o un caviar, eso es algo que todos malentendemos, pues las cocineras y chefs comparten técnicas en la cocina, y esto es acompañado de los mejores ingredientes y vinos, lo que es exquisito”.
Pese a que reconoció que en su primera etapa el festival sólo contemplaba el mostrar la comida gourmet, resaltó que es el primer festival gastronómico que reúne al chef de renombre con la cocinera tradicional en la cocina, donde, junto con los productores locales, trabajarán en una demostración, modelo que ya se está replicando en otros festivales. “Me encanta que ya lo estén replicando, que el chef de renombre de México o Latinoamérica esté al tú por tú con una cocinera tradicional, quienes incluso participan en las cenas maridaje, ambos van a los talleres, ¿por qué separarlos?”, dijo.
Refirió que Morelia en Boca está lleno de sustento por ser un lugar donde las personas se la pasan muy bien, “que realmente disfrutes de un buen plato o bebida, que son de los mayores placeres de la vida, el buen beber o el buen comer, de esos placeres nació el festival”. Por lo anterior, Fernando Figueroa relató para esta editora de dónde surgió su pasión por la gastronomía y también la idea del MEB, junto al también director Fernando Pérez, mientras disfrutaban de una cena maridaje que el entrevistado organizó para el séptimo aniversario del Restaurante Los Mirasoles, negocio familiar con 17 años de existencia, donde su madre Rubí Silva continúa siendo chef.
Crecí en esta casa (Los Mirasoles) y aunque mi formación no tiene que ver con la gastronomía, tuve la fortuna de haber crecido en una familia muy tradicional, mi madre Rubí Silva siempre cocinó delicioso y a eso se dedicó, hizo una investigación muy interesante sobre el rescate de la cocina michoacana, por eso el gusto por la gastronomía fue desde niño. Ella aprendió con su mamá, mi abuela, desde los cinco años, y dice que su primer platillo fue codornices en chileajo, tomó cursos en Argentina, también de cocina española y francesa en la Ciudad de México
Pese a la gran influencia de su madre, no fue hasta que la comida y el vino unió a los actuales directores en el aniversario de este restaurante, “vino un restaurante de México, Les Moustaches, y José Luis Durán, un enólogo muy bueno, y a mi tocayo le encantó la cena y comenzamos a planear este festival de Morelia en Boca. Ahora el evento lleva nueve años y ofrece de todo, es una sinergia de lo mejor de los productos michoacanos, sus cocineras y lo que los chefs realizan, que dan como resultado los platillos maravillosos, todo es aterrizado, todo lo disfrutas llevándotelo a la boca, se trata de disfrutar, es un referente gastronómico y de vinos en México, yo hubiera querido que desde el primer año comenzara a vislumbrarse como tal, pero sólo gracias al trabajo MEB significa renombre, es reconocido y esperado, la comida es para disfrutar y compartir una buena copa de vino”.
Tú los tienes ahí, puedes interactuar, probar, comprarle directamente al productor, entrar a los talleres, a las catas, comer con las cocineras o con los chefs, ahí tú vas a disfrutarte, a consentirte, porque vas a tener experiencias culinarias extraordinarias y lo que pruebas es impresionante, sumado al entorno que el vino crea, he hecho grandes amistades con las personas que saben degustar un buen vino, quienes son las más honestas y la charla que gira alrededor de una buena copa de vino es distinta, te invita a una buena plática, y aparte echan un taco impresionante
Los boletos tienen un costo de 500 pesos por día, hay descuento para estudiantes, y si sólo se quiere estar medio día, hay descuento, hay paquetes: uno de dos días, o el de los tres días. Los asistentes tendrán acceso a degustaciones de platillos y catas de vino, cualquiera podrá asistir a los talleres, con los cuales se da a conocer lo que prepara el chef en conjunto con la cocinera tradicional, “habrá acceso a lo que preparan éstos y van dirigidos a todos aquellos que asistan al festival, no es exclusivamente para los profesionales en el rubro, es para cualquier mortal que gusta de comer”.
Lo que no está contemplado en el costo de entrada es la comida de las cocineras tradicionales y las cenas maridaje, las cuales se realizan viernes y sábado en distintos restaurantes de Morelia, donde los chefs, cocinas y enólogos preparan un menú especial. Cada cena maridaje es una nueva experiencia, y se llevarán a cabo en los siguientes restaurantes: Los Mirasoles, Juaninos, los hoteles Casa Grande, Casa Madero y Casino, La Conspiración, Cocina M de Uruapan y Tata Mezcalería, y su costo oscila entre los 900 y mil 200 pesos, dependiendo de cada lugar.
MEB homenajea este año a la chef Mónica Patiño, con relación a lo culinario y al enólogo Hugo D’Acosta, para que nos dé una muestra de su exquisita labor; más 25 chefs nacionales e internacionales, uno de Perú otro de Colombia y 10 locales. Además participarán 18 cocineras tradicionales y 40 productores agropecuarios.