Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Decenas de pobladores de la comunidad indígena de Sicuicho, municipio de los Reyes, tomaron las calles de Morelia para protestar por el asesinato de Alfredo Cisneros Madrigal, quien se desempañaba como el comisariado de bienes y cuidador de bosques.
La concentración comenzó en el Monumento a Lázaro Cárdenas para desembocar frente al Palacio de Gobierno, lugar en el que exigieron se esclarezca el crimen cometido el 21 de febrero cuando la víctima ingresaba a su propio domicilio.
Voceros del pueblo indicaron que detrás del homicidio hay un contexto de acciones concretas que han visto en la comunidad, tales como la tala inmoderada de bosques y la pretensión del despojo de tierras, hechos por los que ya habían interpuesto una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y el propio gobierno del estado el pasado 10 de octubre.
“Ahora la gente tiene miedo”, aseguraron, por lo que han solicitado que se envíen rondines policiacos para que garanticen que no haya nuevas agresiones.
Luis Miguel Cisneros, hijo del líder asesinado, señaló que la intención fue “intimidar los procesos que lleva nuestra comunidad, por eso exigimos que se esclarezca, que den con los autores intelectuales y materiales, pero más allá de eso, ya les habíamos advertido a las diferentes instancias y nunca hicieron nada”.
Cabe destacar que Sicuicho obtuvo la figura de autogobierno el pasado 6 de noviembre, tras una asamblea en la que 696 personas votaron a favor y cero en contra. Es por ello que sospechan que el delito tiene como fondo inconformidades con esa forma de organización y administración de los recursos sin la intervención del ayuntamiento de Los Reyes. “Queremos ser un pueblo que luche, que trabaje, pero nos quieren intimidar”, subrayó Luis Miguel Cisneros, quien negó que su padre hubiera recibido amenazas previas.
Juan Gabriel Pedraza Ortiz, secretario del Comisariado, destacó que el pueblo de Sicuicho está cerrado “por temor de ser asesinados al momento de salir… estamos siendo amedrentados, pero no sabemos por quién; hay drones sobrevolando y no sabemos qué está pasando”.
Detalló que la denuncia del 10 de octubre ante Profepa fue por la tala clandestina en la zona, mientras que hay otra ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por intento de venta de tierras desde la ilegalidad. Este viernes, dijo, un grupo se movilizó a Morelia para protestar, mientras que el resto se quedó a cuidar el pueblo, que tiene menos de 2 mil 500 habitantes.
Pavel Ulianov Guzmán, vocero del Consejo Supremo Indígena de Michoacán, adelantó que recurrirán a instancias internacionales para que se esclarezca el homicidio, mismo que se suma a por lo menos 60 más en los que las víctimas han sido defensores del medio ambiente en los últimos años.
