Luces, cámara… sexo: Cine Arcadia

Con proyecciones exclusivamente para adultos, este inmueble se ha convertido en una sala donde las cintas pornos se exhiben sin descanso entre las discretas insinuaciones sexuales

Víctor Ruiz | El Sol de Morelia

  · domingo 13 de octubre de 2019

Foto: Adid Jiménez

Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- A las 16 horas con 40 minutos se apaga la única luz de neón azul que se tiene al interior de la sala. No se exhiben anuncios publicitarios, tráilers y mucho menos recomendaciones para disfrutar de la función. Con exagerada puntualidad, Carmen Michaels aparece en pantalla. Se contonea de un lado a otro, manda besos con sus enormes labios y sin pensarlo mucho comienza a desnudarse. La cámara detalla cada milímetro de su cuerpo, pero a nadie le importa. El Arcadia es el único cine de la ciudad donde las películas resultan insignificantes.

A la oscuridad le acompaña un silencio tenso, poco amigable. Nadie habla con nadie. Algunos hombres se mantienen de pie en la parte trasera de la sala, otros más deciden ocupar alguna de las butacas y hay quienes pasan el tiempo inquietos de un lado a otro. Las insinuaciones sexuales son evidentes, pero existen códigos de discreción.

La calidad del audio de la película es intencionalmente deficiente, por lo que en los primeros minutos la atención se centra en las latas de cerveza que se abren, en el humo del tabaco que se aspira y en los pasos que resuenan una y otra vez por los pasillos. Si hasta ese momento existía un mínimo de timidez, ésta desaparece cuando el actor Prince Yahshua se presenta ante Carmen Michaels: el sexo se desborda sobre la pantalla y la sala se convierte en una locación más.

Un roce, una mirada o un murmullo al oído son suficientes para concretar un encuentro sexual al interior del Arcadia. Para llegar a un acuerdo no es necesario saber de rostros, nombres, estatus social y condiciones. Da lo mismo que sea en la butaca, de pie o en el baño. Tras haber concluido, unos se marchan satisfechos, mientras que otros aguardan buscando más placer.

Hot, wet and sexy 2 es un filme del año 2010 dirigido por General Moe que no presume de trama y narrativa. No contiene un solo diálogo, pero su duración es de aproximadamente 3 horas, tiempo suficiente para saciar los deseos sexuales de quienes pagaron sus 50 pesos en taquilla.

El Arcadia ha sobrevivo al paso del tiempo y se ha convertido en un referente de la calle Eduardo Ruíz, justo en el corazón del Centro Histórico de Morelia. A decir de María Velázquez Arenas, directora de Inspección y Vigilancia del Ayuntamiento, el cine posee una licencia de Giro Verde (b) y de alto impacto por la cantidad de gente que se reúne en el lugar.

Dentro de las cosas que tiene permitido el establecimiento, se encuentra la proyección de películas, la venta de alimentos y todo lo que acontece en un cine. Sobre lo sexual, la funcionaria municipal argumenta que al Ayuntamiento no le corresponde regularlo, y que la dependencia a su cargo no realiza operativos en temas del ámbito de la salud.

Pero el cine no está solo. Sobre la misma acera tiene de vecinos a negocios que lo complementan y lo hacen lucir más. A su izquierda, se ubica una Sex Shop que anuncia juguetes para adultos, mientras que a la derecha, se encuentra una agencia que en su nombre ironiza y sirve de antesala para lo que te espera: “Un viaje mágico”.

Nace una idea

Cuando Gustavo Alatriste decidió viajar a España en busca de Luis Buñuel, lo hizo con dos objetivos claros: convencerlo de filmar Viridiana y posicionar a la que en ese entonces era su esposa, Silvia Pinal, como una actriz de nivel internacional.

Fernando Peña, primo de Alatriste, me advierte que tengo solamente 20 minutos para escuchar la historia de cómo Gustavo se convirtió en el padre de las salas modernas de cine en México. Mientras maneja su vehículo rumbo al trabajo, comparte a detalle los inicios, sus vínculos con actrices y la pasión entera que tenía su primo por la pantalla grande.

Aunque Gustavo Alatriste era un hombre de negocios y un industrial de formación, con los años se enganchó al medio artístico. Cuenta Fernando que tras haber estado casado con Ariadne Welter, de nueva cuenta encontró el amor con Silvia Pinal, con quien decidió tomar un rumbo más serio en el mundo cinematográfico convirtiéndose en productor, actor, escritor y director.

Viridiana fue filmada en España en el año de 1961 por Luis Buñuel, producida por Gustavo Alatriste y actuada por Silvia Pinal. El argumento del filme, totalmente anticlerical, no cayó bien en la dictadura de Franco y terminó siendo irremediablemente censurado.

Como pudieron, Gustavo y Silvia viajaron con una copia escondida de la película a la Ciudad de México. Pero se enfrentaron a un nuevo problema: no tenían donde exhibirla. Por aquellos años, un grupo de distribuidores controlaban las salas de cine del país y el costo para acceder a las funciones no debían rebasar los cuatro pesos.

Detalla Fernando Peña que este precio estaba considerado dentro de la canasta básica, es decir, por una cuestión legal no se podía incrementar la tarifa; sin embargo, refiere que el paso del tiempo convirtió a estos lugares en ruinas y “nido de ratas”.


De la necesidad de proyectar Viridiana, asegura Fernando que nació lo que califica como una “idea genial” por parte de Alatriste. En Tacubaya y Coyoacán, el director mexicano instaló las primeras salas de arte que se presentaron legalmente como Cine Club A.C.

Las dos mueblerías que tenía en la Ciudad de México las convirtió en estas salas de arte, llegaban los políticos, empresarios e intelectuales a pagar 25 pesos y el Cine Club los registraba como miembros asociados, fue el negocio que le hizo la vida a Alatriste y el gobierno no pudo hacer nada para impedirlo

Con el éxito de Viridiana, Gustavo nutrió las salas de arte con películas importadas de Europa que a nadie le importaban, pero que en México se convirtieron en éxitos rotundos. Sumado a esto, la relación con Luis Buñuel no terminó ahí y produjeron dos trabajos más en conjunto: El Ángel exterminador y Simón del desierto.

La idea se replicó rápidamente y ordenó a Gustavo Huerta, primo también de Fernando, detectar por todo el país posibles sitios donde se pudieran instaurar más espacios de este tipo. Morelia no sería la excepción y la ciudad de la cantera rosa vería nacer dos salas del proyecto de Alatriste, una instalada en la Avenida Lázaro Cárdenas y la otra, nombrada como “Luis Buñuel”, ubicada en lo que hoy es el Cine Arcadia.

¿Por qué murió el proyecto de Gustavo? Para Fernando, quien también fue gerente de producción en la película “La mujer de 6 litros”, el error de su primo fue no tener la visión de delegar y preparar a personal de confianza para que se hiciera cargo del negocio en el futuro.

Tras su ruptura con Silvia Pinal y posterior matrimonio con Sonia Infante, expone que la caída fue inevitable. La edad y el éxito acumulado fueron dos aspectos que Alatriste no pudo controlar. Se presentó un descuido inminente y de a poco fue perdiendo las salas, entre ellas el Arcadia.

Antes de morir en el año 2006, a causa del cáncer pancreático, Fernando Peña relata que Gustavo preguntó por el Cine Arcadia. “Sí, todavía existe” le respondió a su primo. Alatriste se carcajeó con incredulidad.


Luces, cámara, acción

El Arcadia ofrece funciones ininterrumpidas durante 12 horas al día. A Hot, wet and sexy 2 le prosigue una película que mantiene el sello y el estilo. No importa cuando ingreses a la sala, el escenario siempre será medianamente similar.

Algunos no permanecen más de 15 minutos, mientras que otros se toman su tiempo. Cada quien se desenvuelve a su ritmo y con sus mecanismos. Indagan, rastrean y conectan con un cómplice. Cuando la jornada sexual concluya, saldrán de nuevo a la luz, mirarán hacia ambos lados y caminarán por la Eduardo Ruíz. Volverán a tener un nombre y una apariencia. Sin importar cuál sea, retomarán su papel en esta película que es la ciudad.

  • No se exhiben anuncios publicitarios, tráilers y mucho menos recomendaciones para disfrutar de la función
  • A decir de María Velázquez Arenas, directora de Inspección y Vigilancia del Ayuntamiento, el cine posee una licencia de Giro Verde (b) y de alto impacto por la cantidad de gente que se reúne en el lugar.