Como cada año, una burra blanca será adornada y cargada con recipientes de mezcal, tequila y pulque, bebidas que el pasado se usaron para emborrachar al Ejército español, que en los tiempos de la Conquista saqueaban campos de cultivos y se aprovechaban de los indígenas.
Si bien no se tienen archivos o documentos que refieran esta tradición, se explicó que en el año de 1529, a la llegada de los españoles a la región, dirigidos por Nuño de Guzmán, como presidente de la Primera Audiencia de la Nueva España, comenzó el movimiento para derrocar a los imperios indígenas, y en un acto de hartazgo los lugareños tomaron medidas para recuperar sus derechos.
Octaviano García García indicó que la Caravana de la Burrita representa el triunfo contra los españoles; detrás de este cuadrúpedo se suma el pueblo a caballo y a pie, con vestimenta tradicional; se suman instituciones educativas y las autoridades locales.
El director Cultura de Irimbo refirió que aún se tiene existencia de alrededor de 50 ejemplares de burritas, de cuya leche aún la consumen pobladores de avanzada edad; además de usarse en remedios caseros.
Lizeth Nieves Trejo, directora de Turismo local, también refirió que la caravana, que se distingue por la música, fuegos artificiales y carros alegóricos, surgió en honor a los habitantes que derrocaron a los españoles.
Resaltó que no fue precisamente con armas, sino con pulque, para emborracharlos y hacerlos ceder en sus acciones contra el pueblo.
