Morelia, Michoacán (OEM Infomex).- Investigadores mexicanos trabajan en desarrollar una terapia antiviral para el tratamiento de Covid-19 en la fase temprana, el cual consiste en la administración oral de dos fármacos antivirales que tienen diferentes mecanismos de acción: el Favipiravir y la Nitazoxanida.
En rueda de prensa virtual realizada este jueves fue presentado el Estudio Fantaze, como se ha denominado a este esfuerzo colectivo entre el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), el University College de Londres (UCL), en alianza con Hakken Enterprise.
El estudio está asociado con el ensayo clínico Flare, que actualmente está reclutando pacientes en Reino Unido.
De acuerdo a los investigadores, la terapia combinada de ambos fármacos tiene el beneficio de que es oral, además de que son medicamentos genéricos con precio accesible. Las terapias combinadas permiten administrar dosis más bajas, lo que disminuye la probabilidad de efectos secundarios.
Para elegir las dosis combinadas de Favipiravir y la Nitazoxanida se evaluaron al menos otros 14 medicamentos, posicionando a éstos como las mejores opciones.
A fin de llevar a cabo el estudio, se reclutarán de forma aleatoria a 120 derechohabientes del IMSS que presenten síntomas de Covid-19 en fase inicial y residan en la Ciudad de México, pues debido a cuestiones de logística, las áreas de trabajo de los investigadores involucrados están en esa metrópoli.
El inicio y conclusión del Estudio Fantaze dependerá del tiempo en el que sean elegidos los pacientes.
Sobre el Favipiravir y la Nitazoxanida
Favipiravir es un nuevo antiviral desarrollado inicialmente para la influenza, el fármaco es un inhibidor específico de la síntesis de RNA viral, se metaboliza un trifosfato de ribosito que inhibe específicamente la RNA polimerasa dependiente de DNA del huésped. Se usa en infecciones virales y en algunos casos se ha observado que es capaz de inducir mutagénesis viral.
Por su parte, la Nitazoxanida fue descubierta a inicios de la década de los 70, es un fármaco antiinfeccioso de amplio espectro, con actividad contra una variedad de parásitos, bacterias y virus incluyendo de DNA y RNA.
A partir de estudios in vitro se ha demostrado la actividad de Nitazoxanida contra virus respiratorios que provocan influenza, así como paramixovirus, picornavirus y coronavirus.
Este actúa como un antiviral después del Favipiravir cuando inhibe la maduración de la proteína vírica conocida como nucleocápside N y por tanto el ensamblaje de la partícula virtual. También se ha sugerido que la Nitazoxanida puede tener efectos benéficos no específicos, incluyendo la estimulación del sistema inmune innato y la atenuación de la respuesta inmunológica tardía e inflamatoria.