Morelia, Michoacán (OEM-Infomex). Hasta 36 por ciento aumentó la muerte materna en Michoacán por complicaciones durante el embarazo o parto, lo que coloca a la entidad junto con el Estado de México, Jalisco, Veracruz y Baja California como los estados con mayor número de defunciones registradas por instituciones del Sector Salud.
Durante el foro “Regulación, estigma y sentencia social: La difícil decisión de una mujer”, especialistas médicos, jurídicos e integrantes de asociaciones civiles presentaron un panorama general sobre el aborto en México y en el mundo.
En el evento se destacó que la Organización Mundial de la Salud cada día registra mil 500 muertes maternas por complicaciones en el embarazo y el parto, 13 por ciento de las cuales ocurren por un aborto peligroso y 20 por ciento están asociadas con enfermedades como la anemia, VIH/Sida y padecimientos cardiovasculares.
En México se estiman 31.2 defunciones por cada 100 mil nacimientos, lo que representa una disminución de casi 13 por ciento con respecto a lo registrado en 2018 y cuyas causales son las hemorragias obstétrica, hipertensión, edema y proteinuria en el embarazo, parto y puerperio y enfermedades del sistema respiratorio.
El doctor Alfonso Cabrera, quien expuso el tema “El aborto y la Norma 046” refirió que Michoacán es una de las entidades más excluyentes de la responsabilidad económica y social hacia las mujeres que se les ha negado la posibilidad de interrumpir legalmente un embarazo por circunstancias que ponen en riesgo su vida.
Mientras que la Ley General de Salud en su Artículo 51 obliga a todas las instituciones a atender a todas las víctimas de violación que, en atención a la Norma 046, soliciten servicios para practicarse un aborto en las clínicas del sector público o privado.
Aunado a ello reconoció que profesionistas de la salud no cuentan con la habilidad de reconocer signos de violencia física y sexual hacia las mujeres, de manera que sólo dos por ciento son visiblemente identificadas, 48 por ciento si se le busca y el 50 por ciento restante si son evaluadas con estudios psicológicos.
El médico agregó que uno de cada tres embarazos es de alto riesgo y tan solo en la última semana se han practicado 52 abortos de manera clandestina cuando la meta es que para el 2030 no exista muerte materna por practicar abortos inseguros.
“En México hay un millón de abortos anuales realizados con varios métodos desde medicamentos hasta intervenciones quirúrgicas. Un aborto legal es 14 veces más seguro incluso si se hace en casa con tratamiento y la despenalización del aborto ayudaría a bajar la mortalidad hasta en un 60 por ciento”, afirmó el especialista.
Por su parte, Lourdes Enríquez expuso como parte de su intervención “El aborto en México, elementos jurídicos para su avance” que el derecho a la vida de las mujeres está protegido en la Constitución Política de México y se refiere a la protección de la vida desde el momento en que nace y no desde la fecundación que ha sido elemento de discusión de agrupaciones provida.
“En México y en todos los estados hay mujeres sentenciadas y procesadas por el delito de aborto pero en muchos penales no dan información completa porque la sanción se aplica como homicidio agravado por razón de parentesco”.
Finalmente, Verónica Cruz Sánchez, comentó durante su presentación “El aborto y el estigma social”, que con educación sexual no se previenen los abortos pues un gran porcentaje de las mujeres que lo solicitan fueron víctimas de violación sexual en una sociedad donde se calcula que cada cuatro minutos una mujer es ultrajada.
“En el país hay cuatro mil 118 mujeres criminalizadas por practicarse un aborto, dentro de las cuales 117 son michoacanas y en Morelia 40 están en prisión cumplimentando una condena por interrupción del embarazo”.
Argumentos que para un grupo de provida que asistió al foro no fueron suficientes para coincidir con la despenalización del aborto en Michoacán toda vez que defendieron, sin fundamentos concretos, el derecho a la vida desde la concepción de manera que hubo momentos en los que se intentó boicotear el evento con interrupciones a los ponentes durante la sesión de preguntas.