Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- El actual gobierno heredará a la administración entrante una deuda bancaria a largo plazo de alrededor de 20 mil millones de pesos, además de una deuda con constructores y demás proveedores que oscila los 7 mil millones de pesos, mientras que la de corto plazo con instituciones financieras ya fue solventada.
El secretario de Finanzas y Administración, Carlos Maldonado Mendoza, aseguró que la deuda a corto plazo con bancos ya se pagó en tiempo y forma, es decir tres meses antes de que entre el próximo gobierno.
Por otra parte, reconoció que son alrededor de 7 mil millones de pesos a los que asciende la deuda que aún tiene el gobierno estatal con contratistas y proveedores, misma que cuando entró la administración oscilaba los 14 mil millones de pesos.
Ante el cuestionamiento sobre cuánto de esa deuda se estaría pagando antes de la salida de la administración de Silvano Aureoles, el funcionario estatal consideró complejo disminuir ese pendiente financiero: “Pues se va a quedar (el siguiente gobierno) con esos, yo digo que con esos 7 mil (millones de pesos), veo difícil que nosotros paguemos”.
El encargado de administrar las finanzas estatales mencionó que sí están haciendo algunos pagos, pero pero a proveedores menores, que consideran, dependen de ese recurso para mantenerse.
Entre los pendientes por solventar se encuentran proyectos de obra pública, ya que a decir del presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) delegación Michoacán, Antonio Tinoco Zamudio, aún no se les ha pagado obra que les fue asignada y está en proceso o incluso terminada.
En lo que respecta a la deuda a largo plazo, por los préstamos que ha contratado el gobierno estatal en ésta y pasadas administraciones, se debe a instituciones financieras 19 mil 874 millones 251 mil 150 pesos, de acuerdo al Estado de Situación Financiera del Gobierno del Estado, al 30 de junio del presente año.
Parte importante de la deuda a largo plazo corresponde a la deuda adquirida por el gobierno estatal para infraestructura.
A finales del mes de diciembre del año pasado, el Congreso de Michoacán autorizó al gobernador solicitar un crédito de 4 mil 90 millones de pesos, mismo que de acuerdo al Informe de la Cuenta Pública se destinó a “obras de gran importancia”.
Es de recordar que esa autorización fue, en voz del propio gobernador, “para reponer el procedimiento legislativo” que ya se había llevado al mismo Congreso el 30 de diciembre de 2019.
Fue hasta un año después, cuando el gobernador logró que con dos terceras partes de los diputados se autorizara la contratación de préstamos, lo que a decir de diputados morenistas, como en ese entonces era Alfredo Ramírez Bedolla, fue para legitimar la deuda que ya había adquirido de manera poco transparente.
Ante ello, el Congreso dio a conocer que estaría dando seguimiento al uso de dicho recurso, y en este año dio a conocer que una tercera parte del recurso adquirido con esa deuda de 4 mil 90 millones de pesos se fue a seis obras que “pueden obedecer a compromisos políticos o de interés individual de pequeños grupos”, de acuerdo a un reporte de la Comisión de Gobernación, presidida por Cristina Portillo Ayala.
Los seis proyectos se ubican en Morelia, Huetamo y Zitácuaro, y de acuerdo a la Cuenta Pública se etiquetó para ellos, mil 341 millones de pesos.
De acuerdo al Periódico Oficial del Estado, Michoacán tuvo un presupuesto de egresos para 2021 de 75 mil 616 millones 545 mil 240 pesos. De ese total, los recursos federales son de 65 mil 295 millones 742 mil 730 pesos, es decir, 85 por ciento por esas aportaciones.
Tan solo la deuda bancaria, de 20 mil millones de pesos, es casi tres veces mayor al presupuesto asignado a la Secretaría de Salud (8 mil 249 millones de pesos) y el doble de la Secretaría de Seguridad Pública (4 mil 76 millones 246 mil pesos).
En tanto, los pasivos con los constructores y proveedores (7 mil millones de pesos), es prácticamente el presupuesto asignado a la Secretaría de Salud, aprobado en 8 mil 249 millones 525 mil pesos, y supera con el doble a los recursos que obtuvo la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (3 mil 33 millones 387 mil pesos).
Tan solo el presupuesto para la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas fue de 651 millones 104 mil pesos para el ejercicio 2021, cifra 11 veces menor a lo que el gobierno ya le debe a los constructores.