Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Mientras continúa la realización del puente elevado de Siervo de la Nación, en el sur de Morelia, a la par camina la investigación por presuntos actos de corrupción y faltas administrativas que se cometieron en la primera etapa de la edificación de la obra.
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El titular de la Auditoría Superior de Michoacán (ASM), Miguel Ángel Aguirre Abellaneda, estimó que para agosto del presente año se presentarán las denuncias correspondientes.
Manifestó que el próximo 15 de marzo, la dependencia que encabeza firmará un convenio de colaboración con el ayuntamiento de Morelia para establecer un modelo de trabajo coordinado para la auditación de esta obra.
Debido a que el municipio no cuenta con la información de la construcción, se iniciará un proceso de fiscalización, debido a que el recurso es de carácter público, se levantarán las actas circunstanciadas pertinentes y se llamará a comparecer al entonces titular del FIPE, Luis Navarro Sánchez, así como a cualquier otro funcionario involucrado en la misma.
De ahí, iniciarán los procesos de deslinde responsabilidades, a través de la presentación de las denuncias correspondientes en el Tribunal de Justicia Administrativa y la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción de la Fiscalía General del Estado.
En tanto avanza con la obra, la Auditoría continuará con una revisión semanal de lo invertido y edificado para asegurar que el puente elevado para esquivar el paso del tren se entregue a la ciudadanía como una construcción de calidad que no cause accidentes en un futuro.
La ASM inició la investigación debido a que, a la llegada del nuevo ayuntamiento de Morelia, se desconocía el estatus estructural de la edificación, así como el recurso erogado. Más allá de la infraestructura, la dependencia encontró, en un primer momento, una licitación presuntamente amañada por parte del gobierno municipal para beneficiar a la empresa “Obras y Agregados Cashe S.A de C.V.”.
Además de que en la compra de materiales, el órgano investigador aseguró que el gobierno morenista reportó la adquisición de insumos a un costo más elevado del habitual, aunado a que en muchos casos no se halló prueba de que fuera utilizado.
Por otro lado, se evidenció que también existe una diferencia en el avance físico de la obra en comparación con la inversión: en un pago de anticipo, el gobierno de Morelia por medio del FIPE, erogó 50 millones 836 mil pesos a la empresa en cuestión; asimismo, de otras cinco estimaciones que superan los 35 millones de pesos, es decir que el 68 por ciento de la obra se pagó con un avance físico de sólo el 40 por ciento.
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La construcción del paso a desnivel se contrató en enero de 2021 e inició trabajos dos meses después, en marzo de ese año, con la promesa de culminar en cuatro meses y medio para evitar perjuicios a los colonos de la zona; sin embargo, la edificación se encuentra detenida desde hace más de cuatro meses sin que se tenga una fecha estimada para reanudar los trabajos y culminar el puente.