Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Han pasado más de 50 años y sobre el Tianguis Dominical del Auditorio se sigue diciendo lo mismo: “Aquí encuentras desde un tornillo hasta una camioneta”. La máxima comercial se ha transmitido de generación en generación y cada fin de semana se dan cita cientos de morelianos que convierten las calles de la Ventura Puente en una pasarela de curiosos dispuestos a comprobarlo.
Y es que el “Audi” es el lugar perfecto para desayunar de todo, pero también para encontrar ropa y zapatos importados, discos, casettes, instrumentos musicales, videojuegos, películas, monedas de colección, fierros y un montón de artículos que para la mirada aguda se pueden convertir en auténticas joyas.
La cacería inicia desde las 8:00 horas y ésta se puede prolongar hasta las 15:00 horas. Los gritos van y vienen en cada una de las 24 calles que son territorio “Audi”. “¡Pásele, pásele, que le paseeee le digo!”, todo se convierte en un concurso no establecido de arengas llenas de creatividad.
A decir del director de Mercados y Plazas del Ayuntamiento de Morelia, Guadalupe Pérez Gutiérrez, el tianguis del “Audi” es el segundo más antiguo de la ciudad y el más grande de los 246 que tienen registrados en los cuatro sectores de Morelia.
Actualmente, en este mercado sobre ruedas se instalan en promedio unos mil 805 comerciantes, los cuales se encuentran adheridos a una de las cinco uniones que tienen presencia en la zona: la Unión Mutualista Benito Juárez con mil 200 agremiados; la Unión 5 de febrero con 200 miembros; la Unión Valladolid con 45 comerciantes; la Unión Melchor Ocampo con 280; y la Unión Antorchista que suma 80 locatarios activos.
La dimensión del lugar obliga a que las inspecciones que realiza la Dirección de Mercados sean más exhaustivas. Si bien el funcionario municipal aclara que respetan la autonomía de cada una de las uniones, también es claro que deben procurar que su normatividad no esté por encima de la Ley Orgánica Municipal.
Se insiste mucho en el tema de la venta de animales en la vía pública, nos apoyamos con el Centro de Atención Canino; pero también hemos recurrido a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) porque hemos encontrado animales exóticos como cocodrilos o alicantes
Guadalupe Pérez explica que otro punto en el que han puesto mucha atención es en la higiene de los alimentos, se busca que los comerciantes utilicen cubre bocas y acepten las capacitaciones que se imparten por parte de las autoridades de salud.
Como parte de la vida interna de las uniones, hay acuerdos y compromisos que se han pactado con el Ayuntamiento de Morelia, como es el caso de mantener las calles limpias. Si bien el Gobierno Municipal no interviene con sus camiones recolectores de basura, son los propios comerciantes quienes se organizan y pagan el servicio de limpieza al finalizar la jornada de cada domingo.
Aunque da la impresión de que solamente las uniones pueden hacer uso del tianguis dominical, la realidad es que siempre se cuentan con espacios disponibles para el ciudadano común que va en busca de poder vender algunos objetos.
El director de Mercados detalla que cada domingo las uniones realizan el reparto de espacios hasta las 8:00 horas, pero si se registran ausencias por parte de algunos de sus agremiados, ellos van tomando nota de las zonas que quedan libres para poder ser destinadas a personas externas bajo una cuota de recuperación que en ocasiones no supera los 30 pesos.
EL INICIO
Para entender la existencia del Tianguis del Auditorio, dice el cronista de la tenencia de Santa María de Guido, Lorenzo Velázquez Hernández, que uno se debe remontar al año de 1893, cuando fue creada la plazuela de Carrillo con el objetivo de que fuera un centro de venta.
Relata que en este lugar estaba permitida la venta de madera y animales, así como para el comercio del pueblo de Santa María. Sin embargo, con el paso de los años, el sitio fue invadido de a poco por el comercio informal, lo que generó que la plazuela fuera señalada como un lugar “insalubre y que era ocupado por malvivientes”.
Ante el malestar ciudadano, el miembro de la Asociación de Cronistas por Michoacán explica que las autoridades optaron por construir el Auditorio Municipal en la colonia Ventura Puente, inmueble que fue pensado para la reubicación de los comerciantes formales de la plazuela de Carrillo.
Dicha obra que fue trabajada por el ingeniero Manuel Rodríguez Manolete, se inauguró en el año de 1962 por el entonces gobernador del estado, Agustín Arriaga Rivera, y con la presencia del presidente de la República, Adolfo López Mateos.
Pero no fue hasta el año de 1969 cuando las autoridades municipales lograron liberar la plazuela de Carrillo con la promesa de embellecerla y erradicar la mala imagen que se ganó con los años. El comercio informal quedó descobijado y ante la necesidad de sobrevivir, se instalaron “provisionalmente” en la calle trasera que daba al Auditorio Municipal. Aquel día nacería, sin saberlo todavía, el tianguis del “Audi”.
UNA INQUIETUD
Joaquín López vivía sobre la calle Lago de Chapala. Corría el año de 1969 y por aquellos días, era casi una rutina obligada caminar por el barrio para curiosear en los locales de la zona. Entre las idas y venidas, o por azares del destino, a Joaquín le tocó conocer a Magdaleno Flores Negrón, que en aquel entonces presidía la Unión de Comerciantes y Ambulantes del Mercado Benito Juárez.
Este acercamiento le hizo ser testigo de primera mano del desalojo de comerciantes de la plazuela Carrillo, pero lo que más impacto le provocó, fue el darse cuenta que mucha gente mayor de edad se estaba quedando sin un sustento para sus familias. La inquietud y la necesidad de sobrevivir eran evidentes ante sus ojos de apenas 18 años de edad.
El tema lo enganchó y no dudó en colaborar para conseguir apropiarse de un espacio público a favor de los comerciantes. Dice que a Magdaleno Flores le aprendió todo sobre el manejo de una organización y los problemas que pueden llegar a surgir en ésta.
Cuando por fin lograron establecerse en la calle Lago de Cuitzeo hacia Lago de Pátzcuaro, el debut fue poco exitoso. Con picardía, Joaquín explica que decidieron inaugurar el tianguis un día jueves, situación que resultó una mala estrategia porque tuvo poco eco en los colonos.
Pero el primer fracaso no los ahuyentó y optaron por intentarlo los domingos. El cambio fue satisfactorio y de a poco el tianguis del “Audi” se fue consolidando en la ciudad. Aunque oficialmente el mercado comenzó a funcionar en el año de 1969, fue hasta el 21 de noviembre de 1972 cuando se registraron formalmente como Unión Benito Juárez ante la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS).
Ese día hubo fiesta y así ha sido 48 años después. Cada aniversario no pasa desapercibido y para Joaquín, la satisfacción no pasa tanto por el número de agremiados con los que cuentan, sino en la oportunidad de empleos que lograron generar a través del comercio.
Inclusive son fuentes de empleo para aquellos profesionistas que no han logrado acomodarse en algún puesto de trabajo, aquí los domingos se eliminan las clases sociales, puedes ver a doctores, licenciados y maestros vendiendo cosas como una alternativa de ingresos
Actualmente, Joaquín y su esposa atienden un puesto de ropa, sus hijos hacen lo propio con locales dedicados a la venta de videojuegos y juguetes, mientras que sus sobrinos son los encargados de vender gorras, carteras y lentes.
Los López nunca fallan a su cita, a excepción de hace dos años, cuando por primera vez en la historia una intensa lluvia obligó a que los comerciantes no se pudieran trasladar a la Ventura Puente. De manera involuntaria, sin organización previa y 46 años después, el Tianguis del Auditorio no pudo instalarse.
Durante 40 años, Joaquín dedicó los domingos a levantarse a eso de las 4:00 horas para comenzar a instalar su puesto que se ubica en la calle García Obeso. Desde hace algunos ayeres, reconoce que se da sus lujos. Sus hijos ahora son los encargados de hacer esa labor y él, junto a su esposa, llegan a las 9:00 horas simplemente para comenzar a atender. Eso sí, para él y los suyos, resulta impensable no pasar un domingo familiar en el Tepito de la Cantera Rosa.
