De las galletas de bombón a la técnica de fondant

Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Por generaciones, las mujeres se han dedicado al cuidado del hogar y de los hijos, sin embargo, este cuidado también a hecho que a la par las mujeres creen sus propios negocios, este es el caso de María de Lourdes Sandoval quien se dedica a la elaboración de galletas desde hace 9 años y que, poco a poco ha consolidado su negocio, D’Lulu Sandoval.

“La idea de hacer galletas fue por necesidad económica. Yo trabajaba antes para una empresa y renuncié porque en ese momento estábamos bien económicamente y quería dedicarme a mis hijos, pero ya posteriormente la economía se puso complicada y me di cuenta que las paletas de bombón me llamaban la atención”.

Así pues, fue por medio de las manualidades que le dejaban a sus hijos que Lourdes Sandoval encontró su vocación, “una amiga dio un curso sobre las galletas de bombón y a mí me gustaba ver, entonces comencé de ahí a hacer algunas y a mis amigos y familiares les empezó a gustar, entonces de ahí como a los dos o tres años me comenzaron a recomendar con amistades, pero aún no era un negocio como tal”.

A raíz de las compras que recibía por sus conocidos, la ahora repostera decidió buscar cursos para perfeccionar su técnica, pero los costos eran excesivos y tuvo que buscar otra alternativa, “comencé a buscar mejor cursos en YouTube pero no te dan la receta y bueno todo se fue dando cuando encontré a una muchacha que daba cursos para decorar galletas y la encontré en la expo-pan de San Francisco”.

Para Lourdes Sandoval ese acercamiento fue clave, ya que de ahí partió para decorar y hacer puentes donde al principio ella le vendía las galletas, mientras Lourdes las decoraba. Respecto a las dificultades, la repostera admite que hay ciertos diseños que se complican más que otros”.

Actualmente la comercialización de sus productos se da por medio de recomendaciones y redes sociales, sin embargo, por falta de tiempo, esta última puede ser más complicada por la falta de tiempo.

Además, las temporadas más fuertes en cuanto a pedidos suelen ser el 10 de mayo, Día de Muertos y Navidad. Asimismo ya ha hecho varios pedidos para fiestas infantiles con diseños personalizados.

“Incluso hay una persona que me pidió una galleta como un altar, con la foto del difunto, las velas, la flor de cempasúchil, la foto del difunto, etcétera”

La respuesta en muchas ocasiones de sus clientes ha sido pedirle a Lourdes que les de clases “la verdad no me da el tiempo, porque esto me absorbe por completo, a la casa, además tengo un empleo de medio tiempo por las mañanas, así que para dar un curso requiere de mucho tiempo de preparación”.

Por otro lado, las galletas de la repostera ya han llegado a otros sitios como Tampico, Uruapan, Pátzcuaro, Cancún y Estados Unidos, ya sea para consumir o para revender.

Respecto a su experiencia durante la cuarentena, Lourdes Sandoval compartió que a diferencia de lo que ella pensaba, que bajarían las ventas, estas incrementaron “fue todo lo contrario porque como querían festejar a los niños les hacían pequeñas reuniones en sus casas y tuve más pedidos.

Asimismo en sus productos se encuentran las galletas de mantequilla, de chocolate y de vainilla, así como muffins y pasteles pequeños de sabores como vainilla, chocolate, naranja, marmoleado y red velvet, así como gelatinas encapsuladas. Los precios varían en 9.50 pesos las que miden seis centímetros, las de ocho centímetros en 13 pesos y la de diez centímetros en 16 pesos.

Para Lourdes lo mejor del negocio es que “la relaja”, “es una satisfacción es como un reto y cuando lo logras te sientes bien y económicamente te ayuda. Por eso digo que siempre es bueno que además de estudiar una carrera profesional tener un oficio, porque uno nunca sabe qué es lo que te vaya a retribuir más”.

La repostera señaló que al día hace alrededor de 80 galletas, dependiendo del tamaño o la cantidad del pedido o los centímetros que pidan los clientes.

“Hay días en que no duermo porque tengo mucho trabajo, pero me gusta mucho, yo nunca pensé que me iba a dedicar a esto”

Actualmente dos de sus hijas están entrando en el negocio para ayudar a su madre con la cantidad de pedidos y con algunas técnicas como el fondant.

Dentro de los planes a futuro de Lourdes Sandoval está poner su propia pastelería, sin embargo, algo que la detiene es la inseguridad que impera en el estado “necesitaría varias cosas como refrigeradores, el horno y otras cosas. Además conozco gente que ha puesto su negocio y ha llegado ahí la delincuencia, así que no, prefiero continuar así, aunque sí me gustaría poner una pastelería”.