Morelia, Michoacán. (OEM-Infomex).- “El 2019 fue un año que no la pasamos de muertito, no hubo trabajo suficiente para todas las empresas, fue un año light”, declaró Jesús Antonio Mazier Contreras, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción en Michoacán (CMIC).
Al hacer un balance a escasos días de concluir la presente anualidad, el líder de los constructores michoacanos apuntó que el padrón de socios trabajó al 50 por ciento de su capacidad instalada, el cual está comprendido por 190 empresas, de las cuales unas 20 o 30 estuvieron en “stand by” durante el año.
Algunos de los socios, agregó, no tuvieron la fortuna de contar con trabajo y se fueron en blanco, no se tiene registro de cierre de empresas. En el tema de la generación de empleo, prácticamente se cerrará tablas, solo con 200 empleos más que el 2018. Aunque, es de mencionar que en su conjunto sector industrial cuenta con el registro de 32 mil fuente de trabajo directos.
En torno a las condiciones de la obra pública asignada, Mazier Contreras explicó que una hubo una reducción del 30 por ciento en las acciones de carácter estatal, con una inversión de todas las dependencias por 1 mil millones de pesos.