Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El Consejo Supremo Indígena de Michoacán respalda a la comunidad de Santa María Ostula, municipio de Aquila, que desde hace 17 años pelea un predio de más de 3 mil hectáreas, por lo que pide la intervención de la Suprema Corte de Justicia del a Nación (SCJN).
La violencia que ha suscitado el tema tiene que traer por consecuencia que la SCJN atraiga el caso y lo resuelva, ya que al menos 37 comuneros han muerto y seis más continúan desaparecidos, además de Federico González, el narcotraficante conocido como el Nico, es el principal opositor y ejerce presión sobre los indígenas, informó Raymundo Ortíz Martín del Campo, abogado de la comunidad Nahua, ubicada en la Sierra Costa de Michoacán.
El pasado 21 de junio el equipo jurídico de los comuneros presentó la petición ante le máximo órgano judicial, ya que existe una resolución del Tribunal Unitario Agrario No.38 del estado de Colima, quien le negó la propiedad del predio, sin embargo, desde esa fecha, no se ha tenido ninguna respuesta por parte de la Corte.
El apoyo brindado por las comunidades purépechas, está unido por la hermandad y el despojo al que han sido objeto durante siglos los indígenas, refirió.
De no recibir una respuesta por parte de la Suprema Corte, los representantes jurídicos de poco más de 300 familias, no descartan presentar su intervención ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).