Morelia, Michoacán.- Con el rechazo de la oposición y una crítica hacia la falta de generación de energías limpias, en la madrugada de este viernes el Congreso de Michoacán aprobó la reforma que pondera a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sobre las empresas privadas para brindar el servicio, así como encargarse totalmente de la distribución de la electricidad en el país.
La reforma energética que fue elaborada aún en el sexenio del presidente, Andrés Manuel López Obrador, fue aprobada con un total de 29 votos a favor, cero abstenciones, pero siete en contra de los grupos parlamentarios del PAN, MC y PRI, quienes consideraron que dicha iniciativa federal es un “retroceso” en lugar de que ayude a bajar los precios de los recibos de la luz eléctrica para las familias michoacanas.
Recordar que la reforma constitucional, modificó los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
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Las diputadas que hicieron uso de la voz en la sesión extraordinaria que se realizó en la madrugada, como las morenistas, Nalleli Pedraza Huerta y Fabiola Alanís Sámano, coincidieron en que dicha reforma tienen la intención de sea el Estado Mexicano el que tome el liderazgo de las empresas que son de la nación para que se garantice la autonomía energética de la nación.
Incluso, Alanís Sámano, expuso sin mostrar ninguna prueba, que el gobierno federal de López Obrador fue el que realizó la inversión más grande del país en materia de energía eléctrica.
Sin embargo, el diputado del partido Movimiento Ciudadano, Víctor Manríquez González, cuestionó a los morenistas y sus aliados, que actualmente la CFE no cuenta con las condiciones necesarias para garantizar una distribución eléctrica sustentable, pero que además, durante el último sexenio no hubo inversión y sólo se afectó la capacidad operativa de la Comisión.
En su perspectiva, durante el sexenio de López Obrador, disminuyó la infraestructura eléctrica y quienes sufrirán las consecuencias serán los ciudadanos, ya que los costos aumentarán sin recibir un servicio de calidad.
Mientras que la diputada del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Adriana Campos Huirache, expresó que “insistir en energías contaminantes, es atentar contra el medio ambiente y contra la competitividad del país”, por tanto, el voto de los dos legisladores priistas fue en contra de la reforma constitucional de la cuarta transformación.
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También, el diputado de la bancada de Acción Nacional (PAN), Alfonso Chávez Andrade, manifestó que la reforma energética no generará verdaderas soluciones a los problemas que hay actualmente en esta materia, y que aprobar significaba regresar al pasado y un camino obsoleto, pues, no se priorizan las energías limpias, sino que se “encadena” a las energías fósiles.
“La gente ya no quiere discursos ideológicos, ni de la supuesta corrupción de las empresas privadas, lo que quiere es que baje el precio de la luz en los recibos”, remarcó el panista.