MORELIA, Michoacán.- (OEM-Infomex).- Con un llamado enérgico a los tres poderes del Estado para sacar adelante a Michoacán, el sacerdote José Francisco Martínez Gracián recibió ayer lunes en sesión solemne la condecoración Melchor Ocampo 2019 por su mérito y entrega a la defensa de los pueblos indígenas de la Meseta Purépecha, y sus aportaciones a diversos sectores sociales.
Durante su participación discursiva en la que reconoció el legado de Melchor Ocampo Tapia, el originario de Sahuayo pidió a los representantes de los tres poderes ahí presentes diálogo permanente con los pueblos indígenas “nunca más políticas apaga-fuegos”; mayores recursos para educación, abogando por la Universidad Michoacana, la Intercultural y el Colegio de Michoacán, así como a las escuelas de las comunidades con mayor marginación; y finalmente aumentar las partidas presupuestales destinadas a la investigación.
La propuesta de entregar el reconocimiento a Martínez Gracián estuvo a cargo de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y avalada por la mayoría de los legisladores, ya que se pretendía destacar su labor humanista reflejada en su intensa labor para el rescate del tejido social, la dignidad y la fuerza intrínseca de los pueblos originarios.
Su preparación académica está enfocada a la Filosofía y Teología, en el Seminario Diocesano de Zamora, Historia en la Normal Superior Nueva Galicia de Guadalajara y Geología de forma autodidacta, además que es fundador de la Universidad Intercultural Indígena de Michoacán.
Finalmente, la diputada local por Morena, Cristina Portillo Ayala, quien habló a nombre de la LXXIV Legislatura, reconoció la labor del sacerdote, la cual dijo ha ido más allá de las ideas, y al igual que el michoacano del siglo XIX, ha dado el paso al frente en el terreno de la práctica de sus principios y de la lucha por sus convicciones.
Agregó que dicha distinción lo hace formar parte de una larga y distinguida lista de michoacanos y michoacanas capaces y brillantes, pero que también le obliga a un enorme compromiso con la entidad: ser el promotor de la cultura de la paz que edificó Melchor Ocampo con su ejemplo y su sacrificio.