Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Casi 29 de cada 100 michoacanos han sido víctimas de ciberacoso. Así lo dejó ver el resultado de la encuesta aplicada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) al situar a Michoacán en primer lugar nacional de este fenómeno que de manera sorpresiva afecta en un porcentaje mayor a los hombres.
Los mensajes que recibía Lupita, como le dicen sus familiares y amigos, eran constantes, por lo menos quince a lo largo del día: “eran tantos que ya me daba terror revisar mi celular cuando escuchaba la alerta de la llegada de un nuevo mensaje”, recuerda.
El acoso cibernético inició luego de que se negó a pasarle las respuestas de un examen a un grupo de compañeros.
“Era un grupito de como seis que casi nunca entraban a clases y cuando lo hacían era sólo para echar relajo”, advierte Lupita quien explica que, al ser una estudiante con regulares calificaciones, este grupo de jóvenes la hizo blanco, primero de bullying presencial, exigiéndole que les pasara apuntes o algún trabajo de investigación.
El acoso era molesto, pero lo sorteaba como podía. Sin embargo, cuando éste pasó a su teléfono celular todo salió de control pues los mensajes cada vez se fueron haciendo más amenazantes y después, más frecuentes.
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Las palabras altisonantes que no se atrevían a usar en la preparatoria las escribían en los mensajes acompañados por advertencias que hicieron que temiera por su integridad y se negara a ir a la escuela.
“La situación llegó a tal grado que prefería perder el año a ir a clases porque sabía que ahí los vería”, aseguró.
El acoso cibernético es un acto agresivo e intencionado llevado a cabo de una manera repetida y constante a lo largo del tiempo.
Éste puede ser ejercido por una o varias personas y su principal característica es que se deja a la víctima en indefensión y sin margen de poderse defender ya que actúan desde el miedo y temor que ocasionan, advirtió la psicóloga, Claudia Valdez.
De acuerdo con el libro “El ciberacoso: El tiranizar en la era digital” de Robin M. Kowalski, el ciberacoso se puede dar a través de mensajes de texto, redes sociales, chats, correo electrónico o juegos de internet.
En total, se han identificado al menos ocho tipos distintos de acoso cibernético que van desde los insultos electrónicos hasta el hostigamiento, denigración, suplantación de identidad, sonsacamiento, excusión, ciber persecución y el happy slapping que consiste en grabar una agresión física para después difundirla.
Apenas la semana pasada el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) dio a conocer los resultados del Módulo sobre Ciberacoso en el que se destacó a Michoacán como primer lugar nacional en población que vivió situaciones de este tipo.
De acuerdo con el estudio, el 28.8 por ciento de la población en el estado había sido víctima de este tipo de agresiones.
Lo anterior, quiere decir que por lo menos un millón de michoacanos han sido atacados a través de medios electrónicos.
De acuerdo con las cifras del INEGI, del total de personas que reportaron haber padecido esto, el 28.2 por ciento de las mujeres y el 29.5 por ciento de los hombres.
Entre la forma de violencia más frecuente reportada en el estudio se encuentra la identidad falsa.
La búsqueda de Valeria
El pasado 3 de mayo, Valeria G.D. de 15 años de edad fue reportada ante la Fiscalía General del Estado (FGE) como desaparecida.
La menor, fue vista por última vez en la colonia López Rayón, luego de que presuntamente conoció a unas personas a través del videojuego Free Fire. A más de dos meses de su desaparición, la familia de la jovencita sigue buscándola.
El pasado 13 de junio, en rueda de prensa Verónica Domínguez, madre de la niña pidió a las autoridades agilizar las investigaciones y dijo que se tiene evidencia de que podría encontrarse en Acapulco, Guerrero.
Explicó que, tras empezar a jugar el referido juego, conoció a unas personas que le enviaron a través de un mensaje de WhatsApp boletos de autobús con destino final a Acapulco. Esta información, aseguró, ya se encuentra en poder de las autoridades. Por este caso, la FGE mantiene activa la Alerta Amber.
Sin posibilidad de denunciar ciberacoso
Pese a la gravedad del ciber acoso, éste no se encuentra tipificado como delito, por lo que en caso de que la víctima decida busca la protección de la justicia tendría que recurrir a figuras como el acoso sexual.
A esta limitante habría que agregar que en muchos casos los mensajes, videos o grabaciones no son tomados en cuenta o no son válidos como prueba.
Salvo en apartados como la Ley Olimpia, el tema de las redes sociales y la web son elementos que se toman en cuenta.