El Trastorno Espectro Autista es una condición neurológica en el desarrollo del infante que se hace presente en los primeros 3 años de desarrollo, sin embargo se vuelve permanente el resto de su vida. Curiosamente, son más hombres que mujeres los afectados por esta condición.
Cada 18 de junio desde el año 2005, se celebra el Día del Orgullo Autista, gracias al grupo Aspies For Freedom, ya que las personas continúan encontrando dificultades y limitaciones para desenvolverse en sociedad por la ignorancia sobre dicha condición.
Investigaciones sobre este síndrome han concluido que la mutación genética del cromosoma X junto con el déficit de producción de la proteína FMRP están fuertemente ligados con la discapacidad intelectual, siendo un factor hereditario sin que los padres lo hayan padecido.
Se tiene registro de que en México, uno de cada 115 niños nace bajo esta condición y aunque se cuenta con diferentes instancias que pueden atender y dar seguimiento a los infantes, se requieren más apoyos para las familias de los pacientes.
Por otro lado, en Michoacán se atienden a entre 50 y 80 adultos junto con 14 menores en las unidades médicas de la demarcación. En la actualidad son 36 pacientes quienes reciben tratamiento gratuito en el hospital psiquiátrico y nueve en el Centro Regional de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana (Crediet).
Las características más relevantes del Trastorno Espectro Autista son:
- No hace contacto visual ni se relaciona con su entorno.
- Ya cumplió su primer año y no responde a su nombre.
- Se le dificulta entender las emociones de otras personas.
- Tiene retraso en el habla y el lenguaje.
- Se obsesiona con algunos objetos.
- Repite constantemente las mismas palabras o frases.
- Tiene movimientos corporales repetitivos como mecerse, girar en círculos, aletear con los brazos o golpearse.
Es importante resaltar que los padres de niños con esta condición deben acudir a un especialista para su diagnóstico, además de buscar orientación sobre los cuidados y necesidades que tendrán los niños a lo largo de su vida. Sin embargo, muchos pueden tener una vida social activa, tener trabajos y formar sus propias familias.