Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- La atención adecuada a las patologías tiempo-dependientes como son el infarto al miocardio, embolia pulmonar, sepsis y evento vascular permiten cambiar el pronóstico de un paciente, de grave a positivo en una sala de urgencias médicas, señaló Gustavo López Orozco, presidente de la Asociación de Medicina de Urgencias y Emergencias de Michoacán.
Durante la apertura del Primer Congreso Estatal de Medicina de Urgencias indicó que el tiempo es un factor fundamental para tener una respuesta favorable a patologías consideradas como técnico-médicas. Por ejemplo, ante un infarto, que es una de las primeras causas de muerte en México, si se atiende en tiempo y forma, el diagnóstico cambia.
El embolismo pulmonar, se puede confundir, explicó, con un infarto. Duele el pecho, falta el aire y la persona presenta palpitaciones; “no es un infarto, se trata de un coágulo que se atora en el pulmón y puede ocasionar la muerte de un paciente”.
Explicó Gustavo López Orozco que la urgencia médica en México tiene presencia desde hace tres décadas, de manera específica a partir del temblor de 1985, desde entonces ha crecido el número de especialistas y de espacios para la práctica, cuyo objetivo principal es salvar la vida.
A partir de esta especialidad, se ha mejorado la organización y atención, correcta y adecuada, hacia los usuarios, cuando son víctimas de desastre, enfermedad o cuando se trata de una emergencia médica.
Este congreso de medicina de urgencias y emergencias cuenta con la participación de 20 conferencistas en temas como dolor torácico, grandes simulares del dolor, síndrome coronario, infarto de ventrículo derecho, así como toma de decisiones en escenarios complejos. Tiene como escenario el Teatro Universitario Samuel Ramos, cuyas actividades continuarán este viernes.
El estado de Michoacán tiene el registro de 80 urgenciólogos con una demanda promedio al día de 150 pacientes, lo cual deriva del incremento en la última década de enfermedades y eventos como son los accidentes, lesiones, infartos, embolias, complicaciones de la hipertensión o diabetes, así como los accidentes vasculares y las sepsias.
- La urgencia médica en México tiene presencia desde hace tres décadas, de manera específica a partir del temblor de 1985
