MORELIA, Michoacán.- (OEM-Infomex).- Con el propósito de retomar el trabajo pendiente de sus antecesores y corregir aquellas lagunas legales que no alcanzan a visualizar el fenómeno de la violencia política, la titular de la Secretaría de Igualdad Sustantiva de Michoacán, Nuria Gabriela Hernández Abarca, asumió la presidencia del Observatorio Ciudadano de Participación Política de las Mujeres, cuya encomienda desempeñaban el magistrado electoral, Omero Valdovinos Mercado.
Tras rendir protesta como presidenta del observatorio, la funcionaria estatal resaltó el hecho de que por primera vez una mujer asumiera dicho encargo, mismo desde el cual, dijo, espera sea un espacio de diálogo, abierto y plural para lograr que la población femenina cuente con los mecanismos para que los espacios destinados para las mujeres estén garantizados.
Hernández Abarca también aseguró que su llegada al Observatorio Ciudadano de Participación Política de las Mujeres, de Michoacán, no servirá únicamente para cuantificar cuántas michoacanas han logrado asumir algún cargo que contempla la toma de decisiones, toda vez que su intención será la de garantizar el derecho a la participación política en un ambiente libre de violencia.
Al reconocer los avances que se tuvieron en la entidad derivado del proceso electoral de 2018 de donde se pasó de cuatro a 24 presidentas municipales y de 22 a 88 síndicas; así como un total de 420 regidurías y 16 curules ocupadas por legisladoras, se pronunció por la apertura de mayores espacios a liderazgos juveniles, pues traen una visión y empuje diferente. No dejando de lado a las mujeres indígenas y de la comunidad LGBTTTIQ.
En este evento, el todavía magistrado presidente del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán, Omero Valdovinos Mercado, también rindió su informe de actividades relativo al periodo en que presidió el observatorio, mismo en el que, dijo, se construyó y ejecutaron programas de capacitación y sensibilización en torno a temas de género, participación política e igualdad sustantiva para fortalecer el modelo democrático a través del respeto y promoción de los derechos humanos de las mujeres.
“El OCPM es un canal de interacción entre sociedad civil y autoridades, un mecanismo de participación que posibilita el reflejo de la situación actual de la mujer en el escenario político-electoral; en síntesis, es una oportunidad para alzar la voz y trabajar en la restauración del tejido social”.