Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Con la finalidad de atender y prevenir la violencia hacia las mujeres, la Arquidiócesis de Morelia invita a participar en el Grupo de Apoyo de Mujeres (GAM), en donde a través de elementos conceptuales y metodológicos se ofrece acompañamiento a aquellas que sufran de violencia intrafamiliar o de cualquier otro tipo.
Se recordó que la violencia de género está catalogada como un problema de salud social, por lo que es necesario que la Iglesia colabore de manera transversal con las diferentes dependencias de toda índole.
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Desde este proyecto, se han realizado diversos talleres en el Centro Diocesano de esta capital, en universidades, oficinas gubernamentales, así como en parroquias dentro de la jurisdicción de la Arquidiócesis.
Para dar continuidad a estos grupos de apoyo, se brindarán dos talleres el próximo 8 de marzo de 17:00 a 19:00 horas en las parroquias de Santiago Apóstol, ubicada en la avenida Morelos Norte y en María Madre, iglesia ubicada en la avenida Pedregal, en donde se instalará un GAM.
La Arquidiócesis recordó que, junto a este proyecto, se brinda apoyo psicológico a través de centros de rehabilitación y centros de escucha, así como distintos programas hechos desde la Pastoral Social y Cáritas.
La importancia de la mujer en la Iglesia
Durante una conferencia de prensa, el arzobispo Carlos Garfias Merlos dijo que las mujeres cuentan con un papel muy importante dentro de la Iglesia católica en la práctica litúrgica, recordando en el marco del Día Internacional de la Mujer la importancia de ellas en todas las áreas de la vida.
“La Iglesia reconoce el papel de la mujer en nuestra sociedad y más que nunca en este tiempo de pandemia, se reconoce su gran capacidad en la vida social, en el sector salud, en la vida doméstica, en el sector educativo, en fin, en muchos servicios…. por ello la Iglesia apoya su participación en todos los derechos y obligaciones de la vida pública”, mencionó.
Reconoció que se viven tiempos de cambio, por lo que la Iglesia católica debe adaptarse y entender cómo se han modificado las formas de relación entre hombres y mujeres.
“Estamos viviendo un cambio de época en la historia de la humanidad y la Iglesia reconoce las nuevas relaciones sociales entre hombre y mujer, e insiste en que es deber de todos reconocer y fomentar la participación personal de la mujer en la vida cultural, social, política, económica y eclesial”, finalizó Garfias Merlos.