Morelia, Michoacán-(OEM-Infomex).- El gobernador electo Alfredo Ramírez Bedolla, aceptó que aunque el aguacate de Michoacán representa el producto con mayor exportación del estado, la producción del fruto deberá regularizarse por el impacto ambiental que tiene esta práctica agrícola.
En una intervención hecha en la inauguración del semestre de la Licenciatura en Estudios Sociales y Gestión Local de la ENES Morelia, recordó que en 32 municipios tienen como principal actividad económica la producción de este alimento, lo que complica definir las medidas a tomar para lograrlo de forma “armoniosa con el medio ambiente” sin afectar la economía estatal.
“La primera cadena productiva de empleo es la del aguacate, con 20 mil productores pequeños que generan más de 100 mil de manera indirecta. Pero aquí hay todo un debate que debemos atender por el costo ambiental del fruto sin descuidar el rubro económico. Tampoco no podemos pelearnos con nuestro principal sector productivo”, comenta.
Afirmó que es necesario nombrar al aguacate michoacano como un producto de denominación de origen para definir la altura a nivel del mar, condiciones climáticas y propiedades de los terrenos donde se permita plantar el aguacate. No solo para evitar la sobreproducción, que está llegando a lugares donde no es viable plantarlo, sino también para garantizar la calidad del producto.
“Morelia no es una zona aguacatera pero ya están llegando las huertas; primero se está llevando a cabo un cambio de uso de suelo ilegal y además ese producto no tendrá la calidad de exportación como los crecidos en Peribán o zonas dedicadas a esto”, menciona.
También, sentenció que Michoacán deberá ser “el estado de T-MEC”, pues con el puerto de Lázaro Cárdenas y la ruta comercial de la entidad genera un camino importante entre el centro y el bajío del país.
Hizo hincapié que el crecimiento económico que se realizará en las distintas regiones se haría dependiendo de las características de cada una y sus fortalezas.
“Desarrollemos Lázaro Cárdenas industrialmente porque es una zona considerada para este desarrollo, pero Morelia debería tener otro enfoque, es una ciudad de servicios, pero puede entrar en un campo de atracción y de servicios, pero no es industrial”, finaliza.
Añadió que su administración iniciará con un déficit de cerca de 50 mil millones de pesos sumado de las deudas al sector privado y gubernamental.