Morelia, Michoacán.-"Eran las tres de la madrugada de un lunes 15 de octubre del 2012 cuando la oscura y fría noche se iluminó...", así recuerdan estudiantes la irrupción de policías estatales a la Escuela Normal Vasco de Quiroga de Tiripetío.
A más de una década de los hechos ocurridos, más de mil normalistas tomaron las calles de Morelia en exigencia de las agresiones perpetradas por el entonces gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa.
Pese al calor de la tarde, cerca de 400 alumnos de la Vasco de Quiroga, de la Normal de Arteaga y de Ayotzinapa, que vinieron desde Guerrero para sumarse a la lucha, partieron desde Tiripetío en una caravana conformada por 12 autobuses de la línea Purépechas, seis vehículos particulares y tres camionetas.
Alrededor de las 14:30 horas, el contingente arribó a Xangari, en la salida a Pátzcuaro, donde ya los esperaban otros de la Escuela Normal para Educadoras, de la de Educación Física, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) e integrantes del Frente Nacional de la Lucha por el Socialismo (FNLS).
Una vez reunidos comenzaron su trayecto rumbo al Centro Histórico de la ciudad. A su paso, gritaron consignas como "Tiri vive, la lucha sigue y sigue" mientras circulaban por la Calzada La Huerta con pancartas y el rostro cubierto con pañuelos o máscaras.
La marcha siguió hacia el Supremo Tribunal de Justicia de Michoacán, el cual estaba blindado y resguardado por elementos de la Agrupación para el Restablecimiento del Orden Público (AROP). Los manifestantes lanzaron cohetones, botellas con fuego y piedras que rompieron algunos cristales.
Derivado de este enfrentamiento, se presume que cuatro elementos policiacos resultaron heridos tras recibir las rocas y un normalista con heridas leves. Retomada la protesta, los inconformes realizaron pintas en edificios y tumbaron señalética de tránsito.
Esta conmemoración también tuvo el propósito de denunciar el ataque de días pasados donde uniformados de la Policía Morelia abrieron disparos en contra de ellos cuando llevaban a cabo una de sus actividades.
Ahí, uno de los jóvenes recibió tres disparos, según lo informado por el gobernador del estado, Alfredo Ramírez Bedolla, y otro más se encuentra detenido en la Fiscalía General del Estado (FGE), por lo que responsabilizaron al edil Alfonso Martínez Alcázar y pidieron la liberación de su compañero.
En el avance, a la altura del Monumento a Lázaro Cárdenas, en su cruce con la avenida Madero, la energía de los muchachos pareció disminuir pues dejaron de intervenir los edificios para concentrarse en sus gritos de lucha.
Para evitar daños a sus comercios, locatarios de tiendas de conveniencia, de ropa y restaurantes bajaron las cortinas; mismas que fueron levantadas conforme el grupo se alejaba hacia el Palacio de Gobierno.
Los estudiantes y el FNLS, acompañados de los vehículos, llegaron frente al recinto donde más elementos de la AROP se localizaron en el andador Benito Juárez rodeados de vallas por si se presentara algún acontecimiento.
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Sin embargo, este nunca llegó pues la manifestación se desarrolló en un ambiente de paz en el que únicamente enunciaron consignas y leyeron su posicionamiento para más tarde retornar a sus escuelas y comunidades.
Cada 15 de octubre, los normalistas realizan una serie de marchas en la capital michoacana para mantener viva en su memoria estos actos en su contra y exigirle a las autoridades estatales un alto a la represión estudiantil.
