Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- “Chalino, no vayas a Culiacán que te van a matar”. Con la recreación de esa advertencia inicia el primer capítulo del pódcast Ídolo, la balada de Chalino Sánchez, una investigación de Erick Galindo y Alejandro Mendoza, con producción de Futuro Estudios. El show sonoro es una amplia indagatoria en la vida de ese cantante de corridos norteños que fue brutalmente asesinado en mayo de 1992, un día después de ofrecer un concierto donde recibió la advertencia fatal que finalmente se cumplió.

En entrevista desde su casa en la Ciudad de México, Mendoza, quien nació en Uruapan, dice que el proyecto le llegó directamente de la productora norteamericana, pues buscaban contar un relato para su audiencia con raíces latinas. Él ya contaba con una amplia trayectoria como editor en jefe de la revista Vice, pero regresar a una etapa de investigación y escritura le significó un gran reto, sobre todo porque nunca había hecho un podcast y tampoco se considera un oyente frecuente de este formato. Una de las particularidades de la producción es que se cuenta en inglés y en español, lo que no es una simple traducción, sino dos enfoques con una misma estructura.

“La versión en inglés está a cargo de Erick Galindo, quien nació en Estados Unidos pero es hijo de padres sinaloenses que migraron a California en busca de oportunidades, así que él creció escuchando rap y los corridos de Chalino”. Por su parte, Alejandro siempre ha sido un soldado del rock and roll, pero desde luego que conocía la historia del Rey de los Corridos. Afirma que detrás de este trabajo hay mucho periodismo, pero a su vez la subjetividad y enfoque personal que le da un aire orgánico para quien lo escucha. “Me dejaron hacer lo que quise, ¡hasta decir un montón de groserías!, celebra, al tiempo de adelantar que ya prepara un nuevo show en el mismo formato.

Disponible de manera gratuita en Spotify, el podcast le trajo varios descubrimientos a Alejandro, quien reconoce que narrar la historia de un ídolo que muere de forma violenta es triste, sobre todo porque sucedió a inicio de los noventa, y 30 años después parece que nada ha cambiado.

El caníbal de Playa del Carmen

El 14 de diciembre de 2004, la policía de Playa del Carmen encontró una escena dantesca: un hombre comía plácidamente carne acompañada de cebollas, chiles y jitomates, platillo aparentemente muy mexicano salvo por un detalle: se trataba de vísceras humanas. La historia fue contada en el libro Gumaro de Dios, el caníbal, por la pluma de Alejandro Almazán, quien se dio a la tarea de visitar al condenado en prisión para rascar en los antecedentes de la tragedia. Ahora, ese mismo relato ha llegado al podcast en la plataforma de Podimo, con la narración del propio escritor y la intervención del actor Humberto Busto.

En una amplia charla para nuestros lectores, Almazán dice que escribir el libro le ayudó a entender a este personaje, a ver los claroscuros de Gumaro, pues “ni todos somos un monstruo ni unos angelitos”. Las páginas vieron la luz en 2014 y también alcanzó para trabajos en televisión, pero el año pasado comenzaron a cocinar la idea de revivir los días del caníbal en podcast, para lo cual encontró las habilidades narrativas de Busto, a quien conoció durante el rodaje de la serie El Chapo.

“Esta historia se contó con cierto morbo en las notas periodísticas, pero creo que tanto el libro como el podcast son un ejercicio más reflexivo, con detalles adicionales, y con la firme intención de dignificar a Gumaro”.

El también creador de la serie auditiva Comandante Moneda precisa que para una misma historia se pueden encontrar varios ángulos: “Sobre Gumaro se puede decir que violó, mató y era zoofílico, algo que produce horror, pero detrás de eso hay algo que lo llevó a hacerlo, y cuando investigas descubres cosas, que creció en la pobreza, que nunca recibió ayuda psicológica y soportó estar en el Ejército, donde lo humillaban por ser homosexual”.

Almazán visitó varias veces a Gumaro en la cárcel, seducido al inicio por lo macabro del hallazgo, pero conforme transcurrieron las entrevistas, entendió que lo importante era narrar las circunstancias, conocer a la familia e incluso pedirle permiso al propio caníbal para publicar el libro.

Con el podcast en pleno boom en México, son varias las producciones basadas en el true crime que ya están disponibles para ser escuchadas. Diego Enrique Osorno participa en Transportista, la historia de un traficante de coca por los cielos de México, Venezuela, Colombia y República Dominicana, mientras que Damián Alcázar es la voz narrativa de Fausto, el relato policiaco que cuenta quién asesinó a una familia en Ecatepec, Estado de México.

“El podcast es muy noble, muy flexible, conlleva entretenimiento y eso es un gran reto para quien los escribe y produce”, concluye Almazán.