Morelia, Michoacán.-Las fiestas navideñas son las más esperadas del año para algunas personas en el mundo. Cuando inicia diciembre el entorno social cambia, comienzan las decoraciones alusivas a la temporada y hay un ambiente de mayor empatía en la gran parte de la población.
Sin duda, las celebraciones decembrinas impactan en todos los aspectos a la población desde lo anímico, económico y físico.
Dentro de lo económico impera la compra-venta de mercancías de la temporada invernal, en las cuales buscan los comerciantes vender y agotar los más pronto posible. En el estado ánimo ayuda a que las personas aprovechen las fechas para limar asperezas y comenzar mejor un año nuevo. El aspecto físico es lo más visible, pues cada convivencia es un pretexto perfecto para comer y beber rico y sin culpa; total en enero comenzamos la dieta.
De acuerdo con un estudio realizado por la universidad Copenhague de Dinamarca, las personas que disfrutan estas fiestas son más alegres porque su cuerpo libera las hormonas de la felicidad: oxitocina y dopamina. Mientras que las que son más apáticas sufren más estrés.
No obstante, hay otras personas que no la pasan muy bien, pues en el mes de diciembre sufren depresión y no les queda alternativa. Incluso hay estudios que revelan el aumento de suicidios en esta temporada.
También hay otros sectores que no tienen el privilegio de vivir la navidad como quisieran por falta de recursos económicos y por tanto pasan las fechas desapercibidas o como cualquier otro día.
Sin importar si te gustan o te disgustan las fiestas navideñas, lo importante es recordar y reflexionar que no hay una fecha específica para compartir y ser mejores personas.