Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- El cerebro es uno de los órganos más importantes del ser humano, sin embargo, este tesoro invaluable también está expuesto a desafíos con enfermedades como el Alzheimer, la migraña, entre otros. Acompañanos y descubre las enfermedades más ordinarias en el cerebro y cómo prevenirlas.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía (INNN) dentro de las enfermedades neurológicas o del cerebro más frecuentes en México destaca la epilepsia, tumores benignos de glándula endocrinas, tumores malignos del encéfalo, infarto cerebral, hemorragias cerebrales, esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson, cefalea o dolores de cabeza.

La epilepsia, es una afección caracterizada por convulsiones recurrentes, afecta a un considerable número de mexicanos. Aunque no siempre puede prevenirse, evitar el estrés ayudará en su prevención. Los tumores de glándulas endocrinas pueden ser prevenidos en algunos casos a través de hábitos de vida saludables, pero la detección temprana es fundamental.

La prevención de tumores cerebrales malignos es más complicada. Aunque la investigación médica se enfoca en descubrir factores de riesgo y crear tratamientos efectivos. Asimismo, el infarto cerebral es la interrupción del flujo sanguíneo al cerebro y se puede prevenir mediante hábitos saludables, como mantener una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente y controlar la presión arterial y los niveles de colesterol.

Las hemorragias cerebrales, usualmente ocasionadas por la rotura de vasos sanguíneos en el cerebro, demandan atención médica urgente. Mantener la presión arterial adecuada y moderar el alcohol disminuye el riesgo. En el caso de la esclerosis múltiple, una enfermedad autoinmune del sistema nervioso central, la prevención completa no es posible, pero la investigación persiste.

Aunque no hay una cura definitiva para el Parkinson, factores como la genética y la exposición química se investigan. Un estilo de vida saludable puede ser beneficioso. Las cefaleas no se pueden evitar totalmente, pero se pueden controlar evitando los desencadenantes: controlando el estrés y manteniendo un sueño saludable.

A pesar de que no exista una cura mágica para todas las enfermedades cerebrales, es importante llevar un estilo de vida que cuide nuestro cerebro, por ejemplo, evitando adicciones, alcoholismo y tabaquismo. Además de mantener la mente activa y controlar el estrés, para así prevenir y mejorar la salud cerebral a largo plazo.