Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Son poco más de dos décadas de activismo las que ha realizado Convihve, una organización surgida a principios del año 2000 que brinda apoyo a personas con VIH.

Su actual presidente, Juan Bosco Valle, mencionó que Convihve es una asociación cuyo espacio brinda atención a personas con VIH o sus pacientes, a los que dan albergue cuando vienen del interior del estado a Morelia para obtener medicamentos, o a talleres informativos y sesiones de un grupo de apoyo.

Además, sus integrantes van a otros lugares de la ciudad o de Michoacán para hacer jornadas de detección de VIH y sífilis.

A partir de la experiencia que este trabajo implica, Bosco Valle mencionó que los retos de la actualidad en la atención a esta pandemia “son muy similares a los de hace 23 años, luchar contra la discriminación y el estigma”.

Dice que sigue habiendo mucha indiferencia y miedo, pero considera que ha habido muchos avances y eso nos permite tener un panorama más amplio y un ejemplo de ello es que hoy existen las redes sociales, lo cual facilita darse cuenta de qué pasa en el área de salud o qué medicamentos nuevos hay.

La historia

Si bien es cierto que Juan Bosco Valle ha estado desde los inicios, el fundador fue un hombre llamado Alejandro Cedeño, el cual ya tenía experiencia en el activismo en pro de la comunidad diversa sexual y de personas con VIH, pero en la Ciudad de México.

“Cuando lo conocí me contó que estaba formando un grupo de apoyo, pero distinto al que tenía el COESIDA (el actual CAPASITS) que era un plan piloto de tres meses; entonces Alejandro Cedeño pensó en que fuera un proyecto de más tiempo, no sólo tres meses”, narró Bosco Valle.

Pero una cosa es la idea y otra llevarla a cabo, sobre todo en la Morelia del 2000. El grupo de apoyo inicial se conformó por 15 personas, cuyas reuniones tuvieron lugar en sus propios domicilios, pues si bien la asociación necesitaba de un espacio propio, fue complicado encontrarlo pues, como contó Juan Bsoco “nadie nos quería rentar, en cuanto preguntaban para qué era, había un gesto de indiferencia, temor o asco”.

No obstante, lograron encontrar un local, ubicado en la colonia de Las Flores. Ahí continuaron las sesiones del grupo de apoyo pero el espacio pronto quedó rebasado por las necesidades ya que, como mencionó Juan Bosco Valle, “empezó a llegar gente ya en condiciones malas, que ocupaban de mucho reposo, requería de un lugar en donde no sufrieran rechazo porque a veces su propia familia les discriminaba”.

Te puede interesar: Día Internacional del Condón: ¿por qué se celebra el 13 de febrero y qué significado tiene?

Entonces, la búsqueda se reinició, sólo que ahora ya no de un local, sino de un departamento. El prejuicio se presentó de nuevo y no les dejó encontrar un lugar hasta que la familia de Alejandro Cedeño accedió a rentar un departamento en el Centro Histórico. Eso les permitió tener sala de reuniones, oficina y un espacio donde pudieran pasar la noche personas que, por una u otra razón, tuvieran que estar fuera de casa.

“También ahí empezamos a recibir las primeras donaciones, de la sociedad civil y de otra asociación que existía en ese tiempo llamada Michoacanos Unidos por la Salud y Contra el Sida, que trabajaban el tema de prevención”.

Bosco Valle agregó que incluso el arzobispo de entonces, Alberto Suárez Inda, llegó a dar apoyos económicos para cubrir la renta.

“Se hacían cooperaciones, bazares de ropa usada y así fueron los tres primeros años”.

Los que mostraron displicencia fueron el gobierno del estado y el ayuntamiento, porque los de Convihve gestionaron una casa en comodato, pero de nuevo fue la sociedad civil la que salió al quite.

En este sentido, Bosco Valle contó cómo es que el lugar donde se asienta Convihve llegó a ellos: “Carmelita Hurtado Sosa era una señora que pensó en dejar su herencia en beneficio a la ciudadanía, apoyó a invidentes, a una asociación de personas con cáncer y luego de que la madre dominica Ana Bertha Ortega le hablara de nosotros, optó por donar un inmueble. En mayo de 2003 nos dio la noticia que la casa era para la asociación, fue el mejor regalo que pudimos tener”.

Sobre lo ocurrido con Alejandro Cedeño, el actual presidente relató que en 2008 cayó enfermo y falleció en 2009. Entonces, a partir de ese año, es que Bosco Valle se ha hecho cargo de la asociación.