El saludo es una parte importante entre los seres humanos, quienes de esa manera manifiestan su aprecio y respeto.
El saludo proporciona un reconocimiento hacia la persona a la que se saluda, quien interiormente se sentirá reconocida y aumentará su autoconfianza, aunque sea de forma pasajera.
Pero esto no es sólo propio de los seres humanos. Un equipo de etólogos descubrió que al igual que solemos hacer las personas cada vez que interactuamos con alguien, bonobos y chimpancés también se saludan y se despiden de los miembros de su especie cuando se juntan, según detalla el diario El Mundo.
Compartir intenciones y trabajar juntos en un objetivo común conduce a un sentido mutuo de obligación, también llamado compromiso conjunto.
Ahora, un equipo de la Universidad de Durham, en Reino Unido, observó en los grandes simios pruebas que podrían desafiar la creencia de que el compromiso conjunto es exclusivo de las personas.
Los perros y los gatos, al igual que los simios, también son animales que saben saludar, lo mismo cuando se encuentran con seres humanos como con ejemplares de su propia especie.