La importancia de proteger y cuidar los polinizadores

En la actualidad el trabajo de abejas, aves, mariposas, murciélagos y escarabajos se encuentra amenazados

Sofía Stamatio | El Sol de Morelia

  · jueves 14 de julio de 2022

Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Organizada por un grupo de investigadores del Instituto de Ecología (Inecol) Centro Regional del Bajío y el CIIDIR-IPN Oaxaca, tuvo lugar en Pátzcuaro la quinta edición de 'Celebrando a Nuestros Polinizadores'

También, por el mismo motivo, el pasado viernes se inauguró en la planta alta del Centro Cultural Antiguo Colegio Jesuita la exposición fotográfica 'Polinizadores y flores. Una íntima relación milenaria', coordinada por la ENES Morelia.



¿Por qué celebrar a los polinizadores? ¿Por qué de pronto todo tiene que ver con abejas, flores y murciélagos? Para no perdernos, vayamos un paso atrás: ¿qué es la polinización?

En términos muy sencillos, la polinización es el traspaso de granos de polen de la parte masculina de una flor a la parte femenina de otra, o de la misma flor. Esto da por resultado que la planta sea fecundada y, con ello, pueda producir semillas y frutos.

Es evidente que si este proceso no sucediera, estaríamos en graves problemas ¿Cómo sería un mundo sin semillas y sin frutos? ¿Cómo sería el mundo sin frijol, jitomate, calabaza, papaya, camote, fresa, manzana, papa, pepino, cebolla y chile? ¿Podemos siquiera imaginarlo?



Si no pudieran generar semillas y frutos, y por ende reproducirse, se extinguirían estas plantas y estaríamos en riesgo todas las especies animales que dependemos de ellas.

Según un estudio, de las 171 plantas de las cuales consumimos frutos o semillas en México, el 85% depende en cierta medida de los polinizadores.

Ahora, ¿quiénes son los polinizadores? Aunque el viento y la lluvia ayudan a transferir polen, es el trabajo de innumerables abejas, aves, mariposas, murciélagos y escarabajos el que garantiza la reproducción de millones de plantas alrededor del mundo.



En los últimos 30 años, las poblaciones de polinizadores en todo el mundo se han visto seriamente mermadas principalmente debido al uso de pesticidas, la introducción de especies inadecuadas y la transformación de los hábitats. Estas tres razones se deben a acciones de nosotros, los humanos.

En un minucioso trabajo titulado "Flora melífera de la región centro-este del municipio de Pátzcuaro, Michoacán, México", Fernando Araujo-Mondragón (ITSP) y Rosario Redonda-Martínez (Inecol Bajío) encontraron que buena parte de la vegetación a partir de la cual las abejas de nuestra zona producen miel (flora melífera) "se ha visto afectada por su erradicación, debido a que la mayoría de las especies son malezas, al cambio de uso de suelo, para instalar principalmente huertas de aguacate, y por las plagas de chapulines".

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A pesar de que Pátzcuaro se encuentra entre los 10 municipios más relevantes en cuanto a producción de miel en el estado de Michoacán, hasta la publicación de este estudio no se contaba con ningún trabajo que documentase las plantas de interés apícola.

Concretamente, ¿qué podemos hacer los simples mortales para proteger a nuestros polinizadores? Van algunas ideas:

  • Proteger la flora silvestre nativa. Aunque no responda a altos cánones estéticos (pues parece maleza o jaras), gran parte de la vegetación autóctona juega un papel fundamental en los ciclos vitales de las abejas de la región. Podar estas plantas indiscriminadamente supone un duro golpe contra el frágil equilibrio ecológico.

  • Sembrar un jardín para polinizadores. Entre las plantas florales nativas que atraen abejas se encuentran la llamada “golpe”, distintas variedades de acahual, el típico mirasol, jara china, pescadillo blanco, aceitilla, vara blanca, capitaneja y los diferentes tipos de árnica silvestre que se dan en la región. Otras flores atractivas para abejas, colibríes y mariposas son muicle, mirto, algodoncillo, tejocote, pericón, tronadora, cinco negritos, dalia, lavanda, ruda, bugambilia, salvia, huele de noche, sábila y azalea.

  • Consumir productos apícolas locales, que además de producirse en respeto con las abejas, son de primera calidad.

Compartir esta información con familiares, amistades y vecinos, y estar pendientes de las actividades de divulgación y sensibilización que el INECOL Centro Regional del Bajío realiza continuamente de la mano de la Dirección de Cultura Municipal.