Al coleta moreliano le tocaron los tres avisos En efecto y comodice el refrán, no hay suerte para el hombre honrado, porque elnovillero moreliano Baruch Arreola salió en la Plaza de Toros laJerezana a pelearle el triunfo a sus alternantes, a realizarle lagran faena al de Progreso San Mateo para dejar en claro que quiereabrir las puertas de la Monumental Plaza México, pero amaneciócon el santo de espaldas y el gozo se le fue al pozo hondo y negrode la decepción, porque luego de una faena en la que dejó vervalor y entrega falló con el acero y escuchó los tres avisos tantemidos. Baruch es un novillero serio, responsable, entregado ysiempre honesto al que le llegó la mala tarde porque el novilloera bueno, porque él había toreado muy bien, porque todo caminabaviento en popa, sin embargo una y más veces se le atrevesó elhueso, pinchó y volvió a pinchar en más ocasiones y finalmentevino lo indeseado. El triunfo de la tarde jerezana, allá en latierra del poeta Ramón López Velarde, fue para Raudal García yCristian Antar, quienes cortaron una oreja cada uno. Por su parteel torero hidrocálido y discípulo del matador Antonio Urrutia,Manuel Gutiérrez, enseñó grandes avances en su trasteo, toreómuy bien al de Progreso San Mateo, pero perdió con el acero eltrofeo. Rafael Solano recibió a portagayola y fue agarrado, y sellevó fuerte golpe en la boca, se levantó para realizar faena demucha transmisión. Pinchazo. Así sea.
Al coleta moreliano le tocaron los tres avisos En efecto y comodice el refrán, no hay suerte para el hombre honrado, porque elnovillero moreliano Baruch Arreola salió en la Plaza de Toros laJerezana a pelearle el triunfo a sus alternantes, a realizarle lagran faena al de Progreso San Mateo para dejar en claro que quiereabrir las puertas de la Monumental Plaza México, pero amaneciócon el santo de espaldas y el gozo se le fue al pozo hondo y negrode la decepción, porque luego de una faena en la que dejó vervalor y entrega falló con el acero y escuchó los tres avisos tantemidos. Baruch es un novillero serio, responsable, entregado ysiempre honesto al que le llegó la mala tarde porque el novilloera bueno, porque él había toreado muy bien, porque todo caminabaviento en popa, sin embargo una y más veces se le atrevesó elhueso, pinchó y volvió a pinchar en más ocasiones y finalmentevino lo indeseado. El triunfo de la tarde jerezana, allá en latierra del poeta Ramón López Velarde, fue para Raudal García yCristian Antar, quienes cortaron una oreja cada uno. Por su parteel torero hidrocálido y discípulo del matador Antonio Urrutia,Manuel Gutiérrez, enseñó grandes avances en su trasteo, toreómuy bien al de Progreso San Mateo, pero perdió con el acero eltrofeo. Rafael Solano recibió a portagayola y fue agarrado, y sellevó fuerte golpe en la boca, se levantó para realizar faena demucha transmisión. Pinchazo. Así sea.