Morelia, Michoacán.- Es uno de los espacios deportivos más grandes en Morelia. En la mañana y tarde noche, se encuentra lleno de gente que va a practicar fútbol, básquetbol, voleibol, natación, atletismo, frontón o karate. Es el Centro Deportivo Ejército de la Revolución, también conocido como “El Venustiano”, ubicado sobre la avenida Acueducto, en la colonia Vasco de Quiroga.

El arquitecto y director del área de Infraestructura de la Comisión Estatal de Educación Física y Deporte (Cecufid), indicó que este lugar se inauguró en el año de 1964; al principio constaba del estadio de futbol soccer “Venustiano Carranza”, el de beisbol Francisco Villa, cuatro canchas de básquetbol y dos de voleibol.

Con el paso del tiempo, el espacio fue creciendo y se construyeron más canchas de básquetbol, una alberca, una trotapista y las canchas de tenis. Además, hace seis o siete años, las canchas de tenis y voleibol se techaron como parte de la rehabilitación y modernización, que incluyó también la alberca.

Asimismo, el lugar incrementó sus áreas deportivas con la construcción del campo de tiro de arco, que atienden a atletas muy destacados como Samuel Molina, por ejemplo, además, de que hay una escuela de iniciación para crear nuevos talentos en Michoacán. También hay un espacio polivalente para las disciplinas de taekwondo, karate y gimnasia para eventos nacionales y estatales, apuntó el arquitecto.

Afluencia de gente

Sobre todo durante las tardes, el lugar luce atestado de gente. Al entrar se escucha la goma de los balones de basquetbol y las suelas de los zapatos que raspan el piso. Son niños, niñas y jóvenes en su mayoría los que andan de un lado a otro siguiendo las instrucciones de los entrenadores.

Al fondo, adolescentes y adultos disfrutan del frontón entre las paredes color verde. Otras personas trotan sobre la pista y algunas se concentran en el estadio Venustiano Carranza para practicar futbol. El deportivo se vacía de a poco al filo de las 21:00 horas. Las bocinas de música guardan silencio, mientras la mayoría se dispone a descansar del ejercicio.

En entrevista con este medio, el arquitecto Calderón López refirió que al día en la alberca reciben de 3 mil a 3 mil 500 personas, mientras que en el deportivo se registra un estimado de 3 mil personas en las diferentes disciplinas.

Héctor López, un joven de 22 años, comentó que acude cada tercer día a jugar básquetbol con sus amigos y aunque le parece un espacio agradable, comentó que hay mucha demanda de personas para ocupar los espacios, por lo que a veces es necesario buscar otro lugar o regresar otro día.

El Venus es un sitio práctico, está ubicado casi en el centro de la ciudad y eso facilita que las personas se concentren. Las instalaciones están cuidadas, pero quizás deban ampliar más espacios porque a veces no hay cancha y los entrenamientos aquí duran bastante.

Retos

El arquitecto apuntó que uno de los principales retos para el deportivo es mantener las instalaciones, ya que admitió que existe mucha demanda y aunque eso es bueno, los espacios sufren deterioro.

“Estamos viendo la posibilidad de presentar un proyecto de un auditorio multifuncional en donde había unas canchas de básquetbol, entre la avenida del Estudiante y Acueducto”. Aunque se encuentran en el anteproyecto para la gestión del recurso, ya sea estatal o federal.

Además, subrayó que también se prevé la rehabilitación o sustitución del tartán de la pista de atletismo, que ha sufrido daños por los conciertos masivos que se realizaban anteriormente, aunque apuntó que el promedio de vida del tartán es de cinco años y que ha se ha cumplido.

Después del concierto de los Bukis el director nos dijo que atendiendo la inquietud de los habitantes, ya no se realizarán estos eventos, sobre todo en la cancha de futbol o béisbol. Ya no están programados eventos masivos en los estadios.

Finalmente, exhortó a la población a conocer el lugar, pero también hizo un llamado a cuidar las instalaciones y hacer buen uso de ellas, ya que han tenido problemas, sobre todo con los módulos de sanitarios, porque los descomponen o se roban el equipo.