Morelia, Mich (OEM-Infomex).- Luego de que en días pasados se clausurara una alberca en el municipio de Zitácuaro en la que se detectó el microorganismo Ameba, el cual resulta dañino para los seres humanos, el coordinador de actividades acuáticas de la Comisión Estatal de Cultura Física y Deporte (CECUFID), Marco Hernán Ponce de León Solís, aseguró que en los complejos de la dependencia se toman todas las medidas pertinentes para evitar pasar por una situación similar.
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En entrevista, explicó que la Ameba se da por altas temperaturas, una incorrecta limpieza en la piscina y la aplicación de químicos a destiempo, además de no tener una estricta vigilancia del agua por lo menos cada tres horas.
Se debe mencionar que dicho microorganismo se aloja en las paredes y en el agua de las piscinas, lo que representa un riesgo a la salud de las personas provocando enfermedades gastrointestinales e infecciones graves como la meningoencefalitis.
No obstante, Ponce de León Solís afirmó que los usuarios que acuden a las albercas de la CECUFID pueden estar tranquilos, esto al precisar que la temperatura que manejan del agua no supera los 28 grados.
"Nosotros nos apegamos al procedimiento y al manual de mantenimiento, lo que sucedió allá (Zitácuaro) tuvo que ser un descuido considerable, pues debemos recordar que la Ameba se alimenta de bacterias. En el caso de la CECUFID, procuramos hacer dos retrolavados a la semana y labores de cepillado".
Añadió que actualmente, entre la alberca Aquiles Serdán y la que se ubica en las instalaciones de CECUFID, tienen un registro de más de dos mil usuarios a la semana.
