Morelia, Mich (OEM-INFOMEX).- El entrenador de la selección michoacana de canotaje, Gil Tovar, consideró que las autoridades deportivas del estado no han sido justos con dicha disciplina, pues argumentó que los resultados deportivos que entregan no son equivalentes al apoyo recibido.
En entrevista con el Sol de Morelia, expresó que en muchas ocasiones el canotaje ha sido abandonado cuando se requiere del respaldo de los directivos de la Comisión Estatal de Cultura Física y Deporte (CECUFID), además de que, afirmó, se les recrimina el hecho de exigir apoyos.
Para ejemplo de lo anterior, precisó que ya tienen la necesidad de comprar nuevo equipo para poder competir en el alto rendimiento, pues señaló que cuentan con cinco botes que ya tienen seis años de vida, por lo que constantemente se ven obligados a llevarlos a reparación.
Gil Tovar precisó que una embarcación C1 llega a costar entre 80 mil y 100 mil pesos, mientras que los de categoría C2 su precio llega a alcanzar los 120 mil pesos, montos que, aseveró, no tienen la capacidad de cubrir los deportistas, de tal manera que en competencias pasadas se han visto obligados a rentar canoas para lograr estar al nivel de estados como Nuevo León, Baja California y Jalisco.
Se debe recordar que en la última edición de los Juegos Nacionales Conade, la disciplina de canotaje otorgó a la entidad dos medallas de oro, mismo número de platas y un bronce; sin embargo, el entrenador lamentó que CECUFID ni siquiera los pudo dotar de un uniforme completo como al resto de las delegaciones.
Respecto al Centro de Alto Rendimiento que se encuentra como un "elefante blanco" desde su construcción en el 2014, reconoció que el director de la CECUFID, Raúl Morón Vidal, ha mostrado interés en reactivar el espacio, pero al mismo tiempo ha sido claro al informarles que de momento no cuentan con el recurso para ello.
Lo grave de la situación, abundó, es que el inmueble que fue gestionado por el Gobierno Federal en su momento y que se ubica en la Isla de Urandén, cada vez se va deteriorando más, al grado de que ya presenta cuarteaduras.
No obstante, pese al actual panorama, consideró que el canotaje sigue dando frutos porque han encontrado una fórmula de éxito a través de la motivación, pues desde que Everardo Quirino fue campeón mundial en el año 2007, afirmó que las generaciones encuentran en él un referente para tratar de igualar o superar sus logros deportivos.